Las reclamaciones de entidades sociales como Teruel Existe o Soria ¡Ya!, que han colocado en el primer término del debate político el problema de la despoblación en las zonas rurales, ya han encontrado un interlocutor en el palacio de la Moncloa. Así, el presidente del Gobierno (aunque en funciones), Pedro Sánchez, planteó ayer la posibilidad de descentralizar instituciones gubernamentales y trasladarlas desde Madrid a otras provincias del interior de España como una medida para frenar la sangría demográfica que se ha cebado con estas zonas.

El dirigente socialista deslizó esta medida tras una reunión con representantes de las organizaciones del ámbito de la despoblación y reto demográfico celebrada en Madrid dentro de la ronda de consultas que Sánchez está desarrollando para elaborar una propuesta de gobierno que le permita superar una investidura.

Por este momento el compromiso queda en el aire, aunque el avance es significativo para una reclamación ciudadana que ha cobrado fuerza social en los últimos años. Según indicó a Europa Press uno de los portavoces de las entidades que forman la coordinadora de la España Vaciada, Fernándo Arévalo, el presidente en funciones no llegó a concretar qué instituciones podrían reubicarse en otras ciudades, pero mencionó algunas capitales de provincia «como una posibilidad» que ayude a frenar la despoblación y reactivar laboralmente zonas del interior de España.

«Nos ha llamado la atención y nos ha agradado esta posible medida, con la que el funcionariado contribuiría aportando un granito de arena para hacer más atractivas otras ciudades que no sean siempre las mismas», explicó. «Desde el primer momento ha reconocido la seriedad del problema», destacó el representante de Teruel Existe, Pepe Polo.

Los representantes de las trece organizaciones sociales, económicas y culturales que acudieron a la cita aprovecharon también para reclamar un pacto de Estado «ambicioso, real y duradero» que permita «reformular las políticas de reequilibrio y cohesión territorial». Como mínimo se necesitarán tres legislaturas (con un paquete amplio de medidas) para obtener resultados palpables.

Por el momento la mirada estatal parece ser más comprensiva con los problemas de los territorios rurales. Sánchez calificó como un «error» el diseño radial de las infraestructuras en España, señalaron los portavoces presentes en el encuentro y consideró necesario enfocar la red con un sistema de «malla».

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Los responsables de las plataformas aceptan estos criterios, pero exigen que se concreten en la creación de un ministerio que pueda coordinar todas las tareas necesarias «pasar de las palabras a los hechos». Ese sería el ámbito administrativo adecuado para «ejecutar las infraestructuras pendientes y dotar de telecomunicaciones» al mundo rural, así como para «impulsar la actividad económica», garantizar la «dotación de vivienda y servicios» y lograr un «cambio de imagen del ámbito rural».

Por su parte, la ministra de Educación, Isabel Celáa, reivindicó la importancia de la escuela rural para cohesionar el territorio y luchar contra la despoblación. Y también destacó la importancia de seguir trabajando en la estrategia nacional frente al reto demográfico al ser «un instrumento transversal que implica a todos los ministerios».

Celáa, que estuvo presente en una reunión previa de Sánchez con colectivos educativos, pidió un «esfuerzo colectivo» para hay solucionar el problema demográfico e incidió en la necesidad de implantar la banda ancha para luchar contra el desempleo.