El Gobierno de Aragón cambió ayer de estrategia y pasó de la pesadumbre con la que ha vivido estos días por ser el Ejecutivo que más ha disparado el déficit de sus cuentas públicas al contraataque, presumiendo los datos de la coyuntura económica que sitúan a la comunidad por encima de la media estatal (como siempre ha ocurrido por estar en el cuadrante más pujante de la península).

No fue la única forma de justificar las siete décimas de desvío presupuestario, ya que el consejero de Hacienda, José Luis Saz, también presumió de haber conseguido los objetivos de déficit en el ejercicio anterior y recuperó el leiv-motiv del PP durante el primer tramo de legislatura: la herencia recibida del Gobierno anterior, que habían desterrado hace seis meses y que ahora, tras el varapalo que ha supuesto a su gestión política el haber incumplido con los objetivos marcados, volvió a salir ayer a primer plano.

Estos argumentos no fueron obstáculo para que la oposición parlamentaria en bloque reclamara su inmediata dimisión "antes de que le cese Rudi". Todos reprocharon al consejero la mala confección de los presupuestos y exigieron responsabilidades.

Pero Saz, que minutos antes había asegurado que se sentía "con fuerzas para seguir trabajando por los aragoneses" desde el puesto que ostenta, y que eludió responder si había puesto su cargo a disposición de la presidenta, centró gran parte de su intervención en justificar el desvío presupuestario.

EJECUCIÓN PRESUPUESTARIA

En este sentido, indicó que "la ejecución presupuestaria del 2013 ha sido magnífica, con un 97% de ejecución en el capítulo de ingresos y del 94,6 en gasto, casi seis puntos superior a la del año anterior". Aunque en ningún momento escondió que el incumplimiento del déficit es "un mal dato", se escudó en que "la situación económica de Aragón es mejor que la de la mayoría de comunidades", y ha iniciado la recuperación con "mejores indicadores objetivos que la media española, por lo que Aragón saldrá antes de la crisis que otras comunidades". Entre otros, citó las exportaciones, el crecimiento del PIB, la producción industrial o el último dato del paro, positivo.

Otro argumento insólito fue acusar a la oposición, especialmente a CHA e IU, de incoherentes por criticar al Gobierno por incumplir el déficit cuando ellos se oponen a la estabilidad presupuestaria y acusan al Ejecutivo de recortar. "Si hemos gastado más, es incompatible con decir que ha habido recortes", espetó Saz. Este obtuvo la réplica. El portavoz de IU, Adolfo Barrena, le indicó que él no ha cambiado de discurso, pero el cumplimiento del déficit es el principal objetivo del Gobierno y ha incumplido. "Son ustedes quienes lo llevaban en el programa, no IU", aseguró Barrena, quien llamó a Saz consejero nini: "ni tiene memoria ni cumple los compromisos, ni saca adelante los objetivos, ni gestiona bien, ni reconoce el fracaso, así que ni un día más al frente de la consejería".

Para José Luis Soro, de CHA, la única salida "digna es dimitir" tras "sacar pecho de la gestión del 2012". Soro le indicó que las diferencias de criterio en la contabilidad con Hacienda no las han tenido otras comunidades que sí han sido cumplidoras y denunció que "no haya sabido gestionar el presupuesto y haya negado reiteradamente el incumplimiento", le acusó de "impresentable" y le pidió que no haga más recortes.

La portavoz del PSOE, Ana Fernández, le dijo que ha caído "todo su proyecto político", no es "fiable" y "se tiene que ir", porque el presupuesto era "una chapuza". "Le pedimos que se vaya porque le va a hacer un favor a los aragoneses", inquirió a Saz, tras considerar que se han sobrepasado "todos los límites de la incompetencia" y que la situación de las cuentas públicas es "caótica", con recortes en los servicios, más déficit y más deuda y advertir, ante el plan de reequilibrio económico financiero que tendrá que poner en marcha, que queda poco margen para los recortes si no es en gasto social.