DESDE EL 11-S, EL PRESIDENTE DEL GOBIERNO, JOSE MARIA AZNAR Y OTROS MIEMBROS DEL EJECUTIVO HAN HECHO DECLARACIONES CONTRADICTORIAS, SEGUN LAS CIRCUNSTANCIAS DE CADA MOMENTO. UNO DE SUS OBJETIVOS HA SIDO NEGAR QUE ESPAÑA FUERA OBJETIVO DEL TERRORISMO ISLAMICO, EN ESPECIAL TRAS PARTICIPAR EN LA GUERRA DE IRAK.

Sin peligro N Casi tres meses después de los atentados del 11 de septiembre del 2001 en EEUU, el ministro de Defensa, Federico Trillo, afirmó en una entrevista: "Todos somos potenciales víctimas del terrorismo, pero no hemos sido, ni somos, objetivo del islámico".

Supuesta trama N Tras dos redadas en Cataluña en las que se detuvo a inmigrantes como supuestos miembros de Al Qaeda en enero del 2003, el presidente del Gobierno, José María Aznar, afirmó que el terrorismo islámico era un peligro real. El presidente del Ejecutivo español dijo que esperaba que las detenciones, que luego resultaron ser un fiasco, sirvieran para ver que "no se está hablando de peligros hipotéticos o remotos". Y añadió que había que luchar contra este terrorismo para evitar "que nos dé graves disgustos."

Activistas ciegos N El atentado ocurrido en Casablanca (Marruecos) en el que, entre otros objetivos, resultó afectada la Casa de España, significó un giro con respecto a lo dicho por José María Aznar. España ya participaba entonces en la guerra de Irak. El secretario de Estado de Asuntos Exteriores manifestó que no se trataba de un ataque contra intereses españoles, ya que se trata de "un terrorismo ciego".

Carencia de datos N

En el pasado mes de octubre, tras la amenaza vertida por Osama Bin Laden contra España por tener tropas en Irak, las manifestaciones del Gobierno fueron todavía más contundentes. El ministro español del Interior, Angel Acebes, aseguró que "ningún dato" señala a España como objetivo de organizaciones terroristas islámicas de carácter radical. No obstante, admitió que redes conectadas con la organización Al Qaeda habían realizado "labores de colaboración, financiación y fijación de objetivos y de contacto con redes de fuera de Europa". El ministro de Trabajo y portavoz del Gobierno, Eduardo Zaplana, también hizo manifestaciones en esta línea.