Para Magdalena Alvarez, lo peor de la gestión desarrollada por el PP consistió en el abandono del mantenimiento en las carreteras --"se están cayendo a trozos"-- y en los ferrocarriles. De éstos últimos, aseguró que "se han multiplicado por seis los accidentes que están vinculados a la falta de mantenimiento de las instalaciones y a los sistemas de seguridad". Para luchar contra esta degradación de los medios, la ministra anunció la puesta en marcha de varios planes de choque y la creación de una Agencia Nacional de Seguridad en el Transporte.

De la supresión de peajes apuntó que "no es urgente" y descartó que se opte por la vía de rescatar las concesiones. Las modificaciones costarían 16.232 millones de euros (2,7 billones de pesetas), el equivalente al presupuesto de carreteras durante cuatro años. La ministra se mostró de acuerdo en que hay que reequilibrar la situación en España, pero advirtió de que hay que buscar la fórmula adecuada. Otra pesada losa es la económica. Desveló que Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) debe 5.300 millones de euros (más de 880.000 millones de pesetas), y en el 2010 la deuda ascenderá a 10.000.

Con respecto a los planes de conectar con el AVE las capitales de provincia, Magdalena Alvarez fue hasta cruel al describir "el caos" y el "desorden" recibidos del anterior Gobierno. "Tenemos graves dificultades para encontrar las primeras traviesas diseminadas por España y estamos tentados de pedir la ayuda de los medios informativos", ironizó.