El socialista Manuel Rando fue elegido ayer presidente de la Diputación Provincial de Teruel (DPT), gracias al apoyo de los nueve diputados socialistas, los cinco del PAR y el de Ganar Teruel.

El candidato del PP, Joaquín Juste, contó con los nueve votos de su grupo, y el de Ciudadanos, Ramón Fuertes, se votó a sí mismo.

Tras ser elegido, Rando, alcalde de Calamocha, puso el foco, en su intervención, en la necesidad de mejorar la financiación de los ayuntamientos. Para ello pidió modificaciones normativas y una nueva ley estatal que complemente a la autonómica y permita a los consistorios «disponer de los ahorros de estos años pasados». Además, defendió la necesidad de luchar contra la despoblación, cooperando con otras instituciones y hacerlo con «Teruel en positivo», para aprovechar las «singularidades y fortalezas».

Entre sus objetivos se marcó consolidar los servicios públicos y reivindicar las infraestructuras «básicas y estratégicas para el empleo», especialmente el femenino, además de atender cuestiones como la extensión de la banda ancha, la educación, la cultura, la agroalimentación, el sector turístico y las energías renovables.

En el turno de intervenciones de los partidos, Julio Esteban enmarcó el apoyo del PAR al PSOE en los acuerdos sellados a nivel autonómico, y destacó que su grupo ha sabido primar «el interés general al particular», zanjando las discrepancias internas por la elección de los diputados provinciales que fueron impuestos contra el criterio de parte de la militancia. Tanto él como Rando se abrieron a cooperar con Ganar Teruel en sus decisiones.

El PP, por boca del candidato Joaquín Juste, no se tomó a bien el viraje del PAR, al que apoyaron los cuatro años anteriores, y acusó a la formación aragonesista de deslealtad. Consideró «incomprensible» que, «pudiendo presidir la diputación, la entreguen a los socialistas». Y les reprochó que usen la DPT como «moneda de cambio» para obtener «sillones» en el futuro Gobierno de Aragón.