Los equipos de rescate buscan con pocas esperanzas a tres miembros de una misma familia, que fueron sorprendidos en una riera de Cambrils (Tarragona) por la tromba de agua que cayó la madrugada del martes, aislando totalmente la localidad y sembrando el miedo y el descontrol entre muchos de sus habitantes.

Las tormentas que ayer afectaron con fuerza a Cataluña, la Comunidad Valenciana, Navarra y La Rioja dejaron a su paso pueblos aislados, innumerables cortes de fluido eléctrico y carreteras intransitables, entre otros problemas. Los registros máximos correspondieron al litoral de Castellón, como en Vall d´Uixó (194 litros por metro cuadrado) y Nules (168 litros), aunque en las Bardenas Reales, en Navarra, se alcanzaron unos sorprendentes 130 litros.

En Cambrils, tres adultos consiguieron salvar la vida de un adolescente que viajaba con ellos antes de ser arrastrados por las aguas, informa Ferran Gerhard. Los desaparecidos son Enric Salvador Fuentes, de 49 años, médico traumatólogo de un hospital del Principado de Andorra, su esposa, Maribel Artigues, de 44 años, enfermera del mismo centro hospitalario, y el hermano de ésta, Josep Ramon Artigues. Del relato de Guillem Casal Artigues, de 14 años, hijo de una anterior relación de la enfermera, las autoridades han podido hilvanar cómo se fraguó el suceso. La familia optó por circular con su todoterreno marca Volvo por un sendero asfaltado para regresar a su chalet, ya que las carreteras principales estaban cortadas.

"Parece que se les paró el motor en un vado, la corriente comenzó a arrastrarlos y, cuando los adultos intentaban salir después de sacar al niño que se agarró a unas cañas, una enorme avalancha de agua les engulló", manifestó Robert Benages, alcalde de la ciudad. Un vecino, Martin Martos, no ha podido conciliar el sueño porque había una imagen que no se podía quitar de la cabeza. Se trataba del adolescente empapado, llorando y pidiendo ayuda.

Al margen del suceso en la riera de El Romeral, en la carretera N-340, en el vial de Cavet y en la avenida de la Diputación quedaron atrapados unos 80 automovilistas que tuvieron que ser salvados por la Guardia Urbana, Bomberos de la Generalitat, Guardia Civil y Cruz Roja.

Unos 30 niños de la casa de colonias Marinada también fueron evacuados. Cien personas pernoctaron en el pabellón municipal y Cambrils no tendrá este año fiesta mayor.

El mal tiempo también castigó ayer por partida doble al aeropuerto de El Prat. Primero fue una tormenta con fuerte aparato eléctrico la que impidió los aterrizajes durante más de dos horas y media. Después, el viento provocó que sólo se pudiera utilizar una pista.

En la Comunidad Valenciana, que anoche aún seguía en situación de alerta, una manta de agua cubrió por la mañana la franja costera desde Sagunt a Castellón, informa Ignasi Muñoz. Las precipitaciones dejaron incomunicada por carretera durante todo el día la población de Nules. En la AP-7, la lentitud del tráfico causó un atasco de 15 kilómetros.

La inundación de una de las dos vías del ferrocarril entre Valencia y Barcelona produjo retrasos de media hora. Asimismo, 80 alumnos de una escuela veraniega de inglés en Faura (Valencia) quedaron aislados hasta que fueron desalojados. En Villarreal quedó anegado el campo de fútbol de entrenamientos.