Un hilo conductor para las cuencas más implicadas en la macrocesión

Los autores del informe Aguas limpias, manos limpias encuentran un hilo conductor entre las cuencas del Ebro (cedente en el trasvase y las del Júcar y el Segura, principales receptoras. Según el documento de la FNCA, hay "diversos elementos de conexión" entre las irregularidades detectadas en estas tres zonas.

El informe recuerda que Benigno Blanco, exsecretario de Estado de Aguas, fue responsable de los servicios jurídicos de Iberdrola y estuvo en el consejo de administración de varias constructoras. La empresa hidroeléctrica, "en principio, va a encargarse del bombeo de los hectómetros cúbicos de agua necesarios para el trasvase". La FNCA acusa a Blanco de "favorecer a su antigua compañía".

Esto va unido al hecho de que el alto cargo destacó por su "labor" en la tramitación de los embalses más polémicos de la cuenca del Ebro, como Itoiz, Yesa, Santaliestra y Biscarrués. De hecho, la Fiscalía pide para él hasta trece años de prisión por su actuación en el proyecto de Santaliestra. En esta cuenca, el documento resalta también la figura de Carlos Escartín, exdirector general de Obras Hidráulicas implicado en el caso que por el recrecimiento de Yesa se tramita en un juzgado de Madrid.

Además, el informe asegura que Blanco creó la empresa pública Aguas del Júcar, SA, que contrató a Iberinco, filial de Iberdrola, los estudios técnicos del trasvase Júcar-Vinalopó, relacionado con la macrocesión del Ebro. Y añade que el destino del proyecto Júcar-Vinalopó "incluye las zonas residenciales y recreativas de la provincia de Alicante donde el actual ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, fue el principal impulsor de la actual expansión urbanística de Benidorm".

La relación con la cuenca del Segura se hace a través de Francisco Cabezas, jefe de Planificación del Ministerio de Medio Ambiente y autor material del PHN, que fue comisario de Aguas en esa zona hidrográfica. Se le acusa de haber autorizado sin amparo legal la extracción de aguas subterráneas, "que aumentaron el número de hectáreas de regadío e incluso de campos de golf".