La Dirección General de Salud Pública ha solicitado al Instituto Nacional de Metereología los datos de viento del último mes, para comprobar si ha podido incidir en la transmisión de las partículas de agua que emiten las torres de refrigeración. En Aragón hay censadas 455 torres de este tipo -externas al edificio y que se emplean para disminuir la temperatura del aire que circula por el centro-, que pasan obligatoriamente controles por empresas especializadas cada trimestre, y de las que 405 han sido analizadas por la DGA.