¿Qué piensan los 5.400 trabajadores de Opel en Figueruelas del preacuerdo para el nuevo convenio? Esa era ayer la pregunta del millón que sobrevolaba por todos los rincones de la fábrica, que vivió una tensa jornada de votación para validar o no el pacto alcanzado in extremis entre la empresa y la mayoría del comité. Este fue inevitablemente el monotema de las conversaciones en las pausas de las cadenas de montaje, los corrillos a la entrada y salida a la factoría o las paradas de autobuses. En ocasiones, con debates acalorados y nervios a flor de piel. Unos convencidos del no, otros decantados por el sí como mal menor y muchos indecisos.

El resultado del referéndum se conocerá hoy por la mañana, pero todo apunta a que el escrutinio será igualado. Los testimonios que recababan ayer los medios de comunicación a pie de fábrica eran mayoritariamente contrarios al preacuerdo. Incluso resultaba difícil dar con un empleado abiertamente a favor de lo firmado por UGT, CCOO y Acumagme, pero también se percibía mucho voto oculto y un alto porcentaje de indecisos. «Va a estar reñido. El ambiente está caldeado, pero espero y quiero que gane el sí aunque a nadie le gusta el acuerdo, pero nos jugamos mucho», apuntaba el joven trabajador David Ariño con semblante preocupado. «Hay que pensárselo muy bien porque puede poner en juego el futuro de la planta, pero ¿qué será lo siguiente?», reflexionaba Pablo Sebastián, que todavía no había decidido su voto. Todo lo contrario que Damián Cuartero, un veterano empleado que era partidario del no: «Hay que plantarse y hacer 15 días de huelga, ya verá como así Tavares vendría con otros aires a la planta. PSA va de farol total con lo de llevarse el Corsa».

Los grupos de WhatSapp de los trabajadores echan humo desde la noche del lunes. Mensajes en cadena y comunicados sindicales a favor y en contra del acuerdo han corrido de móvil en móvil. El propio director general de Opel España, Antonio Cobo, remitió una carta a los trabajadores para ensalzar el pacto y pedirles su apoyo ante la trascendencia del resultado.

La expectación es máxima. Y no es para menos. Aragón entero sigue con atención el desenlace del conflicto laboral abierto en la mayor industria de la comunidad. La suerte está echada.