La primera ciudad «prosumidora» de energía 100% renovable. En eso quiere convertir el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, a la capital aragonesa. Este acrónimo, que surge al unir los conceptos de consumidor y productor, es la palabra que ha elegido para describir el proyecto que tiene el primer edil para la urbe que rige, en la que actualmente el 56% de su consumo es de origen verde. Esto pasaría por algo más complejo que, por ejemplo, construir parques eólicos municipales, como podría parecer de un primer vistazo. En concreto, Azcón quiere que en el próximo contrato energético de la ciudad se suscriba un PPA -las siglas en inglés de Power Purchase Agreement, que viene a ser un acuerdo a largo plazo de compra de energía- con alguno de los productores de renovables que se encuentran en las proximidades. Según afirmó, esta fórmula supondría un ahorro del 30% en la factura de la luz.

El alcalde presentó este lunes el proyecto durante el acto institucional Los retos de Zaragoza frente al cambio climático. Allí explicó una medida que aprovecharía la «explosión» que están viviendo las renovables en la comunidad, de manera que la energía que consume el Ayuntamiento de Zaragoza, en la que se gasta al año unos 20 millones de euros, salga de productores cercanos.

EN AÑO Y MEDIO

«Queremos colaborar con los parques de producción de energía sostenible que hay en los alrededores, por tanto queremos que Zaragoza sea la primera ciudad que consuma y produzca energía renovable al 100%. Es un proyecto que tenemos que poner en funcionamiento en el próximo año y medio, cuando renovemos el concurso de energía de la ciudad», relató el primer edil.

«Queremos ser la primera ciudad en España que haga un contrato bilateral de energía con un productor para que seamos responsables de la producción de nuestra propia energía», relató Azcón. Para saber cómo se convertirá en productora, habrá que conocer al detalle los pormenores del pliego de condiciones del concurso público para este PPA.

En teoría, estos contratos son un acuerdo para la compraventa de electricidad a largo plazo (suelen ser 10 años) a un precio, más o menos fijo, entre un generador de energía y un cliente final. El que compra -el consumidor- se ahorra un dinero porque tendrá un suministro de energía a un precio más barato y estable que el que puede encontrar en el mercado y además puede predecir costes; el que vende -el productor- se asegura un ingreso fijo durante un periodo largo y, por lo tanto, estabilidad en sus inversiones.

Sin embargo, en la práctica los PPA se están sofisticando cada vez más y apuestan por fórmulas de precios más complejas y por la llegada de nuevos actores, entre ellos, fondos de inversión extranjeros y pequeñas eléctricas que compran generación de electricidad para revender a sus clientes. El primero que se conoce en España lo suscribió la eléctrica EDP con Calidad Pascual en julio del 2017 y un año después fue Kutxabank la entidad que utilizó esta fórmula con Iberdrola. Desde entonces ha proliferado este tipo de contrato, eso sí, en el mundo empresarial, por lo que la capital aragonesa sería pionera en utilizar un acuerdo de este tipo.

«DEBATES SUPERADOS»

La propuesta del primer edil popular llega después de la que barajó la anterior corporación municipal de ZeC, que pasaba por que Zaragoza comprara directamente al pull energético, sin pasar por intermediarios. Entonces estimaron que este modelo hubiera supuesto un ahorro del 10%, mientras que el que ahora baraja el consistorio, afirmó Azcón, llegaría al 30%.

«Estos debates están superados», afirmó por las opciones que se barajaron en el pasado respecto a este asunto. «Zaragoza tiene que tener una aspiración mucho mayor y en los próximos años debe proponerse como reto ser una ciudad prosumidora de energía», insisitió.

Así, defendió que esta colaboración público-privada es un mecanismo «financieramente sostenible» e informó de que la ciudad dispone de varias centrales eólicas en sus alrededores, susceptibles de suscribir este PPA. Concretamente, indicó que en la actualidad hay 14 parques a una distancia entre 20 y 80 kilómetros de la capital aragonesa y 4 en un radio inferior a los 20 kilómetros.

Con esta idea, y puesto que trabajaría con energía verde, la corporación municipal también quiere ser la primera ciudad española que entre en la lista del Carbon Disclure Project, que incluye a las urbes que más se nutren de renovables. Además, el alcalde se refirió a las ventajas que tiene el territorio para que la capital aragonesa asuma este modelo como el sol, el viento, nodos de conexión eléctrica y grandes espacios que podrían servir para ampliar la masa forestal.

ÍNDICE SOSTENIBLE

El alcalde de Zaragoza visitará este martes la COP25 de Madrid, donde participará en una mesa de debate con otros primeros ediles de diversas partes del mundo sobre las aportaciones locales para luchar contra el cambio climático. Azcón aseguró que la ciudad suscribirá los acuerdos que alcance la cumbre y adelantó que propondrá crear un índice de sostenibilidad de ciudades que permita comparar y conocer los efectos de las medidas que van tomando los municipios para combatir este fenómeno. Además, añadió que también llevará la sugerencia a la Federación Española de Municipios y Provincias.

Precisamente, durante la intervención que realizó el lunes subrayó la importancia de las ciudades en la lucha contra el cambio climático. «Van a ser un campo de batalla fundamental», destacó. En lo que respecta a la ciudad que encabeza, afirmó que podrá alcanzar el objetivo de reducir un 40% las emisiones de gases de efecto invernadero que marca la Agenda 2030 y que, por ello, han elevado esa meta por encima del 50%. Acerca de estos gases, relató que la industria aporta el 52% de las emisiones en la ciudad. Por ello, consideró: «La sociedad tiene que estar especialmente sensibilizada por lo que significa el cambio climático, pero si no conseguimos comprometer al sector industrial, la lucha que puede hacer el ayuntamiento y los ciudadanos no va a ser tan efectiva».

Sobre sus planes para la ciudad, espera profundizar en el ahorro, la eficiencia energética y la producción de fuentes renovables, además de impulsar la economía circular, la recogida selectiva y el reciclaje. Entre las medidas que explicó ayer, destacó la que busca incrementar la masa arbórea. En ese sentido, informó de que este año acabará con 1.500 árboles plantados y espera que el 2020 lo haga con 3.000.

CERO EMISIONES EN GARDENIERS

El Obrador de Conservas Ecológicas del Centro Especial de Empleo Gardeniers, perteneciente a Atades, será el primero de esas características que incorpore las «Cero emisiones» de CO2 a su estrategia y funcionamiento. Así, se prevé que esta planta, la primera y única en Aragón, consiga antes del 2025 el objetivo.

La Cumbre del Clima COP25 de Madrid fue donde el gerente de Atades, Félix Arrizabalaga realizó el anunció este lunes. Ante esa asamblea, Gardeniers expuso su compromiso con la sostenibilidad ambiental, con métodos y procedimientos de trabajo respetuosos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y la social, mediante la inclusión real. Fue de la mano de María Herrero, persona con discapacidad trabajadora del proyecto, y del propio Arrizabalaga.