Una investigación de un grupo de científicos liderado por la International Society for Stem Cell Research ha comprobado en roedores que determinadas sustancias presentes en frutas como la manzana y otros productos naturales tienen un papel cerebral regenerador, propiciando el surgimiento de nuevas neuronas capaces de potenciar habilidades ligadas a la memoria y el aprendizaje.

De acuerdo a una nota de prensa, verificaron por ejemplo que al cultivar en laboratorio células madre de cerebros de roedores y agregar quercetina o ácido dihidroxibezoico (DHBA), dos fitonutrientes que pueden hallarse en las manzanas, se producía un incremento en la generación de neuronas y se activaba un mecanismo de protección de la muerte celular.

El proceso de producción neuronal indicado se denomina neurogénesis. Básicamente, se trata del mecanismo por el cual se generan nuevas neuronas a partir de células madre y células progenitoras. En este caso, el proceso se ve estimulado por la acción de los denominados fitonutrientes, que multiplican la generación neuronal.

Además de los compuestos presentes en las manzanas, otras frutas también poseen sustancias químicas que estimulan las funciones cerebrales. Es el caso, por ejemplo, del resveratrol presente en las uvas rojas. Al mismo tiempo, otros productos naturales como el té verde ofrecen fitonutrientes con múltiples propiedades, como la epigalocatequina-3-galato (EGCG).

Efectos benéficos en el cerebro

Según el estudio publicado en la revista Stem Cell Reports, las pruebas realizadas con posterioridad a la incorporación de los fitonutrientes mostraron que variadas estructuras cerebrales ligadas al aprendizaje y la memoria registraban un notable incremento en la multiplicación de células madre y en la generación de nuevas neuronas.

Los efectos de las altas dosis de quercetina, DHBA y otros compuestos sobre la neurogénesis son similares a los que pueden observarse después del ejercicio físico, un estímulo habitual para la generación de nuevas neuronas, según las conclusiones de los especialistas de la Universidad de Queensland, en Australia, o del Centro Alemán de Enfermedades Neurodegenerativas de Dresden, entre otros institutos de investigación y universidades que participaron del estudio.

Las manzanas y el hipocampo

Específicamente, los científicos se concentraron en una parte del estudio en observar si los factores bioactivos que se encuentran en las manzanas afectan directamente la neurogénesis en la zona del hipocampo.

De esta forma, hallaron por ejemplo que la quercetina, presente en la cáscara de la manzana, promueve la supervivencia y diferenciación de las células precursoras en esa región del cerebro, involucrada en la regulación de diferentes estímulos y emociones, como así también en los procesos de memoria y aprendizaje.

Al mismo tiempo, descubrieron que otros compuestos hallados en la pulpa de la manzana, como el ácido 3,5-dihidroxibenzoico, también promovían la producción de neuronas y limitaban la muerte celular.

En definitiva, concluyeron que los compuestos analizados permitían activar la proliferación de células precursoras y facilitar la salida del ciclo celular, además de incrementar la supervivencia de las células y la diferenciación neuronal.

Sinergia natural

Ahora, los investigadores piensan seguir trabajando con otros compuestos naturales presentes en las frutas para descubrir si actúan en conjunto con los fitonutrientes, generando una sinergia que potencia aún más la neurogénesis y activa las funciones cerebrales cuando se administran en altas concentraciones.

Vale aclarar que se requieren aún nuevos estudios para confirmar si los fitonutrientes pueden mejorar concretamente el aprendizaje, la memoria y otras funciones cognitivas en animales y en humanos, aunque los científicos creen que las futuras investigaciones ratificarán lo observado en los roedores.

Referencia

Apple Peel and Flesh Contain Pro-neurogenic Compounds. Muhammad Ichwan, Tara L. Walker, Gerd Kempermann et al. Stem Cell Reports (2021).DOI:https://doi.org/10.1016/j.stemcr.2021.01.005

Foto:

Las células precursoras del hipocampo se diferencian en neuronas cuando se tratan con el compuesto derivado de la manzana DHBA. Crédito: Centro Alemán de Enfermedades Neurodegenerativas, Dresde, Alemania.

Video y podcast: editados por Pablo Javier Piacente en base a elementos y fuentes libres de derechos de autor.