Los fenómenos tormentosos extremos de los países del Mediterráneo podrían ser pronosticadas hasta con tres semanas de antelación, gracias a los descubrimientos realizados por un equipo de meteorólogos que ha identificado patrones climáticos que funcionan del mismo modo a lo largo de cientos de kilómetros.

Un equipo de investigadores británicos y alemanes ha identificado nueve patrones climáticos a gran escala que influyen decisivamente en las precipitaciones extremas que suelen producirse en el Mediterráneo. Este hecho puede ayudar a predecir mejor las fuertes lluvias incluso con tres semanas de antelación, según la investigación del Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Largo Plazo, de Reino Unido, y TU Bergakademie Freiberg de Alemania, publicada en la Revista Internacional de Climatología.

Estos nueve patrones están relacionados con los sistemas inestables de baja presión o con condiciones anticiclónicas estables, que se extienden a lo largo de cientos de kilómetros.

La lluvias extremas tienen consecuencias devastadoras para la sociedad y la economía en el Mediterráneo. Sin embargo, “es extremadamente difícil pronosticar con muchos días de antelación cuándo y dónde se producirán esas lluvias intensas. Por tanto, los investigadores se esfuerzan por desarrollar nuevas herramientas para predecir mejor los fenómenos meteorológicos extremos que permitan alertas tempranas y estrategias de mitigación adecuadas”, explicó el autor principal, Nikolaos Mastrantonas.

Para identificar los patrones descubiertos, los investigadores analizaron los datos meteorológicos desde 1979 hasta hoy, clasificando las condiciones meteorológicas de cada día en nueve patrones diferentes en el Mediterráneo. El estudio demuestra que hay una fuerte relación entre esos nueve patrones y la ubicación de los eventos climáticos extremos. “Ahora podemos utilizar los datos para llegar a un modelo que ayudará a predecir mejor las lluvias extremas en el Mediterráneo”, señaló el profesor Jörg Matschullat.

Dependiendo de dónde se produzcan estos patrones, es posible esperar un determinado comportamiento climático. Por ejemplo, un sistema de baja presión centrado sobre el Golfo de Vizcaya aumenta más de seis veces la probabilidad de lluvias extremas en las regiones montañosas y costeras de España, Marruecos, Italia e incluso en los Balcanes Occidentales.

El equipo también ha descubierto que las montañas crean un fuerte vínculo entre zonas muy distantes entre sí. En el centro-oeste de Italia, por ejemplo, tres cada diez fenómenos extremos ocurren simultáneamente sobre Montenegro y Croacia, a pesar de que hay casi 500 kilómetros entre estas dos zonas. “Esto es a consecuencia de los Apeninos, que bloquean una parte sustancial del flujo de aire y frecuentemente obligan a la humedad a precipitarse en la parte occidental de Italia y el mismo día sobre Croacia”, explica el investigador.

Según los científicos, los modelos actuales de pronóstico del tiempo ya pueden proporcionar información fiable sobre la variabilidad del clima a gran escala hasta con tres semanas de antelación, un período de tiempo conocido como escala subestacional.

“El siguiente paso en este trabajo será cuantificar cómo de confiables son los modelos de pronóstico del tiempo de última generación para poder predecir los nueve patrones identificados. Nuestra intención es incorporar dicha información en nuevos productos de pronóstico que informen sobre el clima extremo en el Mediterráneo”, añadió Matschullat.

Artículo de referencia: DOI: 10.1002/joc.6985