Relleno al gusto. Puede ser nata, trufa o sin relleno
Elaboración
Se mezcla un poco de los 250 ml de leche tibia con 2 o 3 cucharadas de la harina de fuerza.
Se añaden 25-30 gramos de levadura fresca desmenuzada y lo removemos todo.
Se tapa y se deja fermentar unos 15 o 20 minutos en un lugar cálido para que fermente.
Una vez fermentada la masa en un bol grande añadimos el resto de la harina y vamos añadiendo poco a poco el resto de ingredientes: azúcar, ralladura de limón y naranja, sal, leche, 2 huevos, azúcar, la masa de arranque que teníamos en otro recipiente fermentando, el agua de azahar y por último la mantequilla o margarina derretida.
Removemos hasta que quede una masa homogénea.
Enharinamos una superficie lisa, y amasamos durante unos minutos con nuestras manos.
Si es necesario le añadimos un poco más de harina para poder trabajar bien la masa.
Le vamos dando forma de bola a nuestra masa, y una vez bien amasada, la guardamos en un recipiente hermético o tapada con uno o dos paños húmedos durante un par de horas en un lugar cálido y sin corrientes.
Después de un par de horas la masa habrá crecido el doble.