España viajará a los cuartos de final de Tokio 2020 en el vagón de las mejores, el de las primeras de grupo que tiene como premio evitar a Estados Unidos en cuartos de final, gracias a un triunfo contra Canadá (66-76) gestionado desde la defensa y la agresividad que sorprendió a las norteamericanas.

El madrugón que tanto costó ante el debut contra Corea del Sur pareció, esta vez, aliarse con las españolas. Sea lo que sea que tomaran de desayuno, les sentó tan bien como para protagonizar un arranque fulgurante (13-23 en el primer cuarto) que no dio respiro a una selección canadiense a la que parecieron pegársele las sábanas.

Cristina Ouviña, clave en todos los tirones ofensivos del conjunto español con 15 puntos y 7 asistencias, Astou Ndour (20 puntos y 11 rebotes) y Laura Gil, que fue un candado en defensa (8 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias y 4 robos de balón), lideraron una España a la que observaba en el Super Arena de Saitana Jorge Garbjosa, el presidente de la Federación Española de Baloncesto.

España arrancó enchufada, intensa en la presión, con un 0-5 liderado por una activa Ouviña. Nirra Fields salió del banquillo para levantar a las canadienses, pero Ndour y Gil dominaban la pintura y la seleccionadora canadiense Lisa Thomaidis tuvo que pararlo cuando vio que España podía marcharse (11-17, min. 3).

Lo que hubiera dicho la seleccionadora de las norteamericanas se quedó en nada cuando Queralt Casas, hasta ahora inadvertida en el campeonato, encadenó un aro pasado con una bandeja tras robo sobre Fields (11-21, min. 8). El 13-23 final, y sobre todo las 6 pérdidas de balón canadienses, mostraban qué defensa estaba imponiéndose.

Canadá puso un punto más de agresividad y a España se le acabaron las ideas en ataque. Había que cambiar cosas, y tras parcial 10-4 canadiense (23-27, min. 14) Mondelo llamó a las suyas al banquillo. Las españolas seguían sin circular bien el balón ni acertar al triple, pero robaban y corrían, y con eso era suficiente para mantener la iniciativa al descanso con 34-40 en el electrónico.

El paso por vestuarios vino bien al conjunto español. Salieron de nuevo intensas, rápidas al robo y a la carrera, y con el primer triple del partido, de Ouviña, pusieron un 0-9 para la máxima diferencia del duelo (34-49, min. 23). Thomaidis llamó a las suyas ante el peligro cierto de una escapada hispana.

Tan cierto como que una serie de defensas espectaculares de las españolas y el segundo triple de Ouviña pusieron a las de rojo en las dos decenas de diferencia (36-56, min. 26). España robaba, corría y disfrutaba, aunque comenzaba a precipitarse y concedía siete puntos seguidos a las canadienses, lideradas por la joven Laeticia Amihere (20 años), que sumo 6 puntos en esta parte final de cuarto para dar vida a las canadienses: 47-60 al cierre del tercero.

El susto siguió, porque Miranda Ayim, un triple de Kia Nurse y la ya mencionada Amihere encendieron las luces rojas de una España precipitada en ataque (54-60, min. 32). Canadá ya le había competido hasta el final a Serbia, y no iba a hacer algo diferente contra las españolas, con Nurse asumiendo galones, pero con respuesta de los dos triples de Alba Torrens, hasta entonces menos acertada (59-68, min. 35).

A Torrens se sumó Ndour, aprovechando bajo el aro el resultado de tres buenas defensas españolkas y la tranquilidad regresó al marcador: 61-74 a 2.59 del final. Las canadienses no dejaron de apretar, pero España lo tenía atado. El 66-76 final confirma que viajarán a los cuartos de final en el grupo de las mejores.

- Ficha técnica:

66 - Canadá (13+21+13+19): Nurse (14), Colley, Carleton (9), Rancock-Ekukwe (4), Achonwa (9) -quinteto inicial-, Fields (9), Pellington (3), Alexander, Amihere (10) y Ayim (6).

76 - España (23+17+20+16): Domínguez (4), Ouviña (15), Torrens (12), Gil (8), Ndour (20) -quinteto inicial-, Casas (8), Carrera (6), Cazorla (2), Conde y Palau (1).

Árbitros: Jung Yu (TWN), Leandro Lezcano (ARG) y Yevgeny Mikheyev (KAZ). Sin eliminadas.

Incidencias: partido correspondiente a la tercera jornada del Grupo A del torneo femenino de baloncesto, disputado en el Saitama Super Arena, sin espectadores por las medidas sanitarias contra la pandemia de coronavirus.