Semana se San Valentín y bombas. Regalar mascarillas, regalar vacunas contra la viruela, regalar un poco de esperanza, preparar manifestaciones. Almodóvar triunfa en Hollywood la misma semana que los hispanos de USA se quejan de una boutade de una revista que denigra el español. La minoría más mayoritaria. Los lunes al sol no está en la onda de los seleccionadores de la Academia, pues refleja demasiado bien la realidad básica del mundo: para comprarse una hamburguesa hay que trabajar un día entero, especialmente en China, que es donde ensamblan los juguetitos que regalan como señuelo de la propia hamburguesa. Los lunes al sol le habría gustado a Greenspan. Es una película de economía. Es una película que refleja metafóricamente el estado del cine y el teatro en España, más que la reconversión industrial que está protegida por el plan Miner y similares. Hable con ella está basada en recortes de periódicos, en historias reales muy extraordinarias, regresar del coma profundo, violar a una mujer en coma. Más algunas tramas de toreros y bailarinas colaterales. Euforia generalizada por la nominación, pues Almodóvar va a leer el manifiesto de la mani contra la guerra. Todo conspira contra esta locura que paraliza el consumo interno e impide arrancar a las economías. A Microsoft le ha puesto la Unión Europea otro pleito. Hasta al usuario más modesto le llega el momento de tropezar con el monopolio Windows. Va a jugar online y el XP le dice que no tiene el programita Java, a causa de un pleito con Sun. A fuerza de poderío y de abarcarlo todo, a fuerza de ganar juicios y perderlos, Windows se va convirtiendo en un monumental estorbo. La revista TIME pregunta a sus lectores online qué país supone mayor amenaza para la paz mundial y propone tres respuestas. Ayer tarde el resultado era: Corea, 7%. Irak, 8 %. EEUU, 84%. (Total votos, 36.900). Quizá habría que detener a los lectores de la revista. Caen las tardes ya un poco minifalderas, minifaldables, amaina el cierzo y baja el turbión del Ebro, pero el mal rollo de la guerra infecta las vidas y los sueños, infecta los insomnios que ella misma provoca.

Semana de San Valentín y bombas. El mundo ha dejado de besarse, está ocupado en llegar a fin de mes, en ver qué dicen Powell o Laden. La gente ya sólo se besa en Teruel.

*Periodista y escritor