La ministra de Medio Ambiente está haciendo gala de una capacidad que su ministerio va a tener que demostrar en breve plazo. Elvira Rodríguez ha anunciado muy ufana que en dos meses su ministerio habrá analizado las más de 35.000 alegaciones que se esperan contra el trasvase del Ebro hasta el 2 de agosto, fecha en la que termina el periodo de información pública. Desde ese día y hasta comienzo de octubre, que es el plazo que se ha dado el ministerio para emitir la declaración de impacto ambiental, el equipo de la ministra se "estudiará" todos y cada uno de los planteamientos que se están preparando contra las enormes deficiencias ambientales, y para todos habrá "cumplida respuesta", dice Rodríguez. Escrito está el farol de la ministra ayer en Alicante. Ahora tendrá que quedarse sin vacaciones y arremangarse para dar salida a la práctica enmienda a la totalidad que preparan los gobiernos de Aragón y Cataluña.