Tres días después de que apareciera una sima, la casa de los números 6 y 8 de la calle Justo Navarro de Calatayud sigue cediendo. Los vecinos esperan angustiados el resultados de las últimas pruebas geotécnicas, pero cada vez más se hacen a la idea de que no podrán volver a sus casas. El drama de estas familias es enorme. Ayer, los bomberos pudieron acceder al interior para rescatar a los animales de compañía que permanecían prácticamente abandonados desde la madrugada del lunes, mientras se terminaban los trabajos de apuntalamiento en el garaje. Los riesgos que corrieron unos y otros indican que hay que tomar soluciones urgentes.