Después de que el ministerio de Hacienda negara que haya prohibido al Gobierno de Aragón endeudarse para pagar los daños de las riadas, el consejero Bandrés ha lanzado un órdago al ministro Montoro: le pide que autorice un plan extraordinario para no desequilibrar el objetivo de déficit cero. Sería una buena fórmula para seguir aplicando la ley al mismo tiempo que se cubren los daños de un fenómeno natural. Pero sería también un buen ejemplo de coherencia, pues las Cortes de Aragón aprobaron por unanimidad dos leyes de concesión de créditos para hacer frente a esta situación. El PP formaba parte de esa unanimidad.