Con la venida del PSOE al Gobierno de la nación, las expectativas de mejoras en muchos aspectos parecían posibles, entre ellas la televisión. Para ello proponían nombrar una comisión de sabios, intelectuales que podrían aconsejar e introducir cierto nivel de calidad. Lo cierto es que uno de sus miembros, el escritor Fernando Savater exponía no hace mucho que dicha comisión era prácticamente inexistente, cosa que lamentamos, porque a pesar de la mala fama de las comisiones, esta propuesta podía suponer el tan deseado cambio, y no sólo en sus presentadores y directores sino en la calidad de la escena. De momento la TVE se está llenando de buenos deseos, de agradecimientos, como los dedicados a mi maestro "por enseñarme a expresar lo que llevo dentro". Una campaña acertada que se debiera institucionalizar y, año tras año, recordar esa figura de tutor, de hombre o mujer de amplios conocimientos y sentido común. Reconocer y potenciar esos valores a las futuras generaciones puede marcar ilusiones que servirán como homenaje a ese docente vocacional, que llega a involucrarse en la vida del alumno como algo más que un mero enseñante.

*Pintora y profesora de FP