Probablemente ha sido la imagen de Federico Jiménez Losantos sentado en el banquillo, sin quitarse el abrigo a pesar del ambiente caldeado del juzgado, tratando de cubrirse de su soledad como antesala de una condena por injurias graves. Síntomas de cambio de ciclo.
La Conferencia Episcopal ha entrado en periodo de reflexión sobre la línea editorial de su emisora, la cadena COPE. El Partido Popular se renueva y pone a mujeres de talante moderado y moderno al frente del partido.
Los duros ni siquiera han dado la batalla. El presidente del partido, Mariano Rajoy, modula su política a los nuevos tiempos. La confrontación deja de estar de moda.
La Iglesia española ha pretendido vivir en la ensoñación de que la cadena de radio de la que es propietaria tenía vida propia, vicaria de una independencia ejercida por sus periodistas en estado incendiario, de la que no tenía responsabilidad.
Esa dislexia ha tocado fondo; sencillamente ya no se puede sostener que los obispos españoles no responden de los contenidos de la radio de la que son propietarios.
Todo esto ha sido posible hasta que una de las víctimas de la citada emisora, el embajador del Vaticano en España, el nuncio Manuel Monteiro de Castro, trasladó al Papa el estado de las cosas que se deriva de la confrontación de la cadena COPE no sólo con el Gobierno de España sino también con el líder de la oposición.
Monseñor Rouco Varela, que trató de precipitar la renovación de Federico Jiménez Losantos antes de que se conociera la sentencia de la querella interpuesta por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, se ha quedado en minoría y todavía no está claro cómo será el futuro en el interior de la emisora. Pero ya no podrá ser lo mismo.
Desaparecerá entonces uno de los motivos de desencuentro del Gobierno con el Vaticano y la parte más radical de la derecha española se verá huérfana del altavoz que la ha mantenido viva. Nuevos tiempos en los que mucha más gente que la Conferencia Episcopal buscarán una nueva orientación al abrigo del calor de la situación que comienza.
Periodista
