Se habla como nunca de educación, se citan hasta la extenuación los problemas de la adolescencia y se comentan las dificultades de los padres para dedicar a sus hijos unos siempre escasos minutos de convivencia cotidiana; se debate ampliamente sobre la soledad afectiva, la degeneración que provocan las drogas y la influencia negativa que puede llegar a ejercer el abuso de las nuevas tecnologías. Pero cuentos y libros rara vez son tema de conversación, relegando a un triste olvido el papel que hasta tiempos muy recientes ha desempeñado la literatura en la formación de los jóvenes.

El libro infantil y juvenil no está de moda, cierto. Al menos, ha perdido gran parte del protagonismo de antaño, enfrentado a las frías pantallas LCD; sin embargo, todavía se muestra capaz de liderar la actividad en las Ferias del Libro y, sobre todo, conserva su mágico poder para penetrar en las inquietas y curiosas mentes de los peques cuando alguien, quizá por casualidad, pone un libro en sus manos. Debemos, sin duda, un homenaje a la narrativa orientada hacia los niños. ¿Qué mejor ocasión para hacerlo que la brindada por el museo de la ciudad de Madrid, a través de la exposición dedicada a Monserrat del Amo? Hoy se cumplen 60 años de la publicación de su primera novela y 30 desde la concesión del Primer Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil, al que se unía el año pasado el III Premio Iberoamericano. Monserrat del Amo ha visto pasar la mayor parte de su vida narrando y escribiendo historias que siempre aspiraron a ser algo más que un instrumento para llenar unas horas de ocio: su obra ha abierto sendas de desarrollo personal, de respeto y solidaridad; de fraternidad universal y empatía hacía otras formas de pensar. En sus relatos, la voluntad es sempiterna protagonista que estimula la victoria sobre las contrariedades y conduce al triunfo de la amistad y de la generosidad. ¿Acaso son estos unos valores pasados de moda? Yo afirmaría, más bien, que en ellos se esconde la solución a los más graves problemas que hoy amenazan a la humanidad.Escritora