Toda la economía está muy interrelacionada, pero los sectores que tienen en la construcción su locomotora marcan su caída de una forma generalizada. Uno de ellos es el que se dedica a la fabricación y mantenimiento de ascensores, que en la comunidad cuenta con empresas punteras. De entrada, el desplome de la obra nueva supuso para estas compañías una reducción de la cuenta de resultados del 25%, lo que invariablemente se tradujo en pérdida de empleos, hasta 300 se han evaporado en la comunidad en los últimos tres años. No son los únicos. La industria del mueble, prácticamente ha desaparecido y las firmas de electrodomésticos o cierran o generarn expedientes de regulación, entre otros subsectores. Como proponen los sindicatos, la rehabilitación de viviendas puede ser una solución mientras se recupera la construcción.