Decir que la crisis se arreglaría dejando a los políticos sin sueldo (o eliminando su función) vale como fácil desahogo para los ignorantes y los parafascistas. Pero es una parida monumental. Cospedal y los de su cuerda pretenden marcarse un tanto reduciendo drásticamente el número de diputados, por ejemplo, del parlamento castellano-manchego. Será un ahorro ridículo. Claro, que no es eso lo que busca la jefa, sino garantizarse el futuro control de la minicámara trucando la norma electoral. Basta hacer números para darse cuenta de que, al haber menos escaños que cubrir, la distribución apenas será proporcional por mucho que se aplique la ley d'Hont. El más votado se llevará la parte del león mientras se quedarán fuera opciones respaldadas con el 15% de los sufragios e incluso más. Ha de quedar claro que no es el mecanismo proporcional-corregido (la ley citada) el culpable del bipartidismo y de la escasa utilidad del apoyo que reciben IU o UPD, sino las circunscripciones provinciales, sobre todo cuando en cada una de ellas solo están en juego tres o cuatro diputados. Si la circunscripción abarcase cada comunidad autónoma (y no digamos si fuera única) las cosas cambiarían mucho.

El mito del gasto público resulta hasta gracioso en un país que ha enterrado decenas de miles de millones en rescatar al sector financiero o intervenir en él. Si ustedes se han asomado a las informaciones sobre el fiasco de las subastas de coches (de cochazos, nada) y propiedades inmobiliarias del Gobierno aragonés, habrán visto que lo recaudado no es gran cosa. En cuanto al sueldo de sus señorías y otros ilustrísimos, bien está poner coto al cachondeo de las dietas y demás complementos, pero pretender que un político con dedicación exclusiva cobre mil euros mensuales es un absurdo, o una forma de adjudicar en exclusiva la representación del pueblo a quienes puedan permitírselo.

Yo quiero que me representen personas preparadas y honradas, con criterio, con principios, con conocimientos. Y en número suficiente. Siendo así, pagarles dignamente sería la mejor inversión.