Opinión | El artículo del día

¿Dónde queda la democracia?

En demasiadas ocasiones ya no es la política y el derecho quienes gobiernan la sociedad, sino los mercados

Ensimismados entre las consultas y negociaciones para formar Gobierno, absortos con tantos órdagos, bloqueos, tacticismos y postureos de salón, apenas nos quedan espacios para otras noticias, que como la lluvia fina, van calándonos hasta empaparnos de la barbarie de acuerdos xenófobos, limitaciones a la movilidad en la UE, planteamientos desintegradores del espacio común y normativas insolidarias contra los refugiados, de aquellos mismos que se beneficiaron de su convención en otros momentos .

Desgraciadamente son muchas las muestras, en las últimas semanas, de la regresión que vivimos, para con aquella ansiada Europa social de valores y ciudadanos .

El parlamento sueco aprobó el 5/XII/ del 2012, una moción en la que pedía a su Gobierno, el reconocimiento de la RASD (República Árabe Saharaui Democrática). El nuevo Gobierno de centro izquierda la tomó en consideración en 2014 y la retiró el pasado 16 de enero. Entretanto el gobierno marroquí paralizó el 29 de septiembre la apertura de la tienda de IKEA en Casablanca (45 millones de euros de inversión, 450 empleos directos y 1.500 indirectos) por "problemas administrativos", subsanados de inmediato, tras la mencionada renuncia y permitiendo su apertura el pasado 13 de febrero.

Es lo normal, dirá cualquier observador de la relación entre política y empresas .Sí, pero aquí hay un gran salto cualitativo. Suecia ha privilegiado históricamente su relación con el pueblo saharaui, con apoyo económico, abundantes intercambios, y una cobertura diplomática en la defensa de los derechos humanos encomiable, ha sido una de las señas de identidad de la socialdemocracia sueca y sus gobiernos, reconocida internacionalmente. Romperla, para preservar los intereses de esta empresa, en un país fagotizador de derechos y libertades, es un precio muy alto. ¡Qué paradoja!, quienes más quieren al Estado fuera del mercado, son los primeros en utilizarlo para sus intereses.

La reciente visita del presidente iraní a Roma para firmar un acuerdo comercial con Italia por 17.000 millones de euros, no merecería comentarios, si no fuese porque el lugar legido para ello y los pasillos de acceso, llenos de grupos escultóricos con desnudos, fueron encajonados para no ofender a los visitantes con tamaña exhibición de arte clásico. ¿Por qué esconder nuestra cultura si es la mejor credencial en el mundo? Todo lo contrario, hay que lucirla, sobre todo en Italia donde tanto se contribuyó a su creación y difusión.

¿Vale la pena ofendernos a nosotros mismos por no hacerlo al presidente de Iran?.Porque estamos hablando de sumisión de unos gobernantes anfitriones ante la visita del mandatario de un país, donde todavía se lapida a las adúlteras y se ahorca a los homosexuales en las plazas públicas, además de otras barbaridades parecidas.

Si escondemos la cultura y aborrecemos de nuestras convicciones por interés del mercado, ¿dónde queda la democracia? Los neoliberales y conservadores llevan años defendiendo que "lo que es bueno para las empresas, es bueno para el país"... y así nos vá.

La reacción de la mayoría de gobiernos europeos ante los refugiados provenientes de la guerra de Siria sonroja, deprime y avergüenza.

EL PARLAMENTO danés aprobó el pasado 25 de enero, requisar los bienes y posesiones que excedan de 1.340 euros a los refugiados; eso sí, podrán conservar las alianzas matrimoniales. Suiza ya lo hace con un límite de 1.000 CHF , el Estado de Baviera con todo aquello que supere los 750 euros, en Baden-Württemberg solo se pueden quedar con 350... Y en esta carrera por extremar dureza, están las soluciones del secretario de estado de Inmigración belga en la reunión del Consejo de Interior de la UE el pasado 26 de enero. "Devuélvanlos al mar... me da igual, si se ahogan". O la del líder laborista holandés del pasado día 28. "Métanlos en un ferri y devuélvanlos por donde han venido", a los refugiados recién llegados a las costas griegas.

Hay más, el presidente húngaro afirma que los refugiados ponen en peligro "la cristiandad europea". El checo que "su integración es prácticamente imposible". El eslovaco pidió "solo cristianos por no tener mezquitas" , y en Bulgaria la Iglesia ortodoxa ha pedido al Gobierno que no deje pasar a los musulmanes.

España se comprometió a recoger 17.680 personas en octubre, hasta ahora ha concedido asilo a 18 ¿? Casi tantos como medallas a vírgenes y santos por el ministro del Interior.

Cualquiera convendrá que en demasiadas ocasiones ya no es la política y el derecho quienes gobiernan la sociedad, sino los mercados. Las coacciones que la economía impone a las decisiones políticas, reduce la esencia de la democracia, imposibilitando a la política para gobernarlas.

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