En algo tendríamos que ser los españoles los primeros. El último estudio de la OCDE sobre competencias para la vida, nos corona. Nuestros jóvenes de 15 a 27 años tienen cada vez peor comprensión lectora, solo nos supera Grecia. Las causas principales: el abandono escolar temprano y el alto porcentaje de ninis. España es el país de la UE con mayor número de jóvenes que no estudian más allá de la ESO y con la mayor proporción de ninis (junto con Italia, Grecia e Irlanda), factores responsables de que entre la adolescencia y la vida adulta no solo no se procuren nuevos aprendizajes, sino que se registren importantes pérdidas de los conocimientos adquiridos. Hasta tales niveles, que cada vez los jóvenes españoles tienen más dificultades para entender el significado de los textos que leen, aquellos que claro está, se acercan a un libro, los menos.

Y es que el problema viene de raíz. Los profesores españoles incentivan menos la lectura que la media de los docentes europeos, y este es uno de los factores que más influye para mantener el interés por el aprendizaje. Si el profe no es capaz de transmitir su entusiasmo por la materia que imparte, el nivel de motivación y de perseverancia en el estudiante se reducen, y por ende, también disminuye en gran medida el rendimiento a medio y largo plazo. Habría que preguntarnos las causas de vivir en una sociedad en la que nuestros formadores no pueden o no quieren motivar el interés por el conocimiento en los alumnos. Excesiva extensión del curriculum escolar, cierto; falta de competencias formativas y vocación docente, bastante habitual; fallas del sistema educativo, y ninguna gana de corregirlas, seguro. La ecuación perfecta para tener al pueblo doblegado. Sálvese quien pueda de esta España estancada.