Temor en los pueblos por el fin de semana festivo

En menos de una semana, la Guardia Civil y la Policía han abortado tres fiestas juveniles no autorizadas en localidades como Mequinenza y Chiprana y en una casa en Zaragoza. Ni que decir tiene que ninguna de ellas cumplía las normas sanitarias vigentes, bebían alcohol, iban sin mascarillas y no guardaban la distancia mínima de seguridad. Y es más, en la del barrio zaragozano de Casablanca, el organizador incluso estaba contagiado de covid. En todas ellas, los participantes han mostrado una irresponsabilidad incompatible con la verdadera situación de la pandemia en Aragón.

En la última semana, el covid se ha cobrado 40 vidas, 15 más que en la semana anterior, y en lo que va de año el virus ya ha sumado un millar de muertes. Son unas cifras para reflexionar si este fin de semana, el más fiestero del año tradicionalmente, debe abordarse como si los festejos patronales no estuvieran prohibidos. Hay preocupación entre los alcaldes de los municipios afectados por los brotes que puedan surgir fruto de las aglomeraciones y de las reuniones sociales. Y aunque muchos de ellos han programado actividades culturales seguras para contrarrestar la ausencia de actos puramente festivos, hacen una llamada a la prudencia y apelan a la responsabilidad individual para no pagar después las consecuencias. Tal es la preocupación que la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) se ha comprometido a intensificar la vigilancia, en coordinación con las fuerzas de seguridad, en los más de 1.200 municipios de toda España que deberían celebrar sus fiestas patronales en torno al 15 de agosto.

Por segundo año consecutivo, los pueblos se han convertido en uno de los destinos vacacionales de primer orden y todos han incrementado notablemente la población. Hay que insistir en recordar que el virus no ha desaparecido y la vacunación, aunque muy avanzada en Aragón, no evita el contagio. Las fiestas están prohibidas y las medidas sanitarias, vigentes. Del compromiso con estas normas depende la salud de todos.