Los datos de inflación dados a conocer este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirman que la economía camina hacia un callejón sin salida que conduce sin remisión a una desaceleración durante la segunda parte del año. La gran incógnita será comprobar la intensidad y la profundidad de la misma, ya que algunos expertos anticipan un posible escenario de recesión en los próximos trimestres.
En el caso de Aragón, la evolución de los precios refleja un incremento de la inflación del 11% en el último año, lo que la sitúa como la cuarta comunidad que experimentó un mayor repunte en junio respecto al mismo mes de 2021, solo por detrás de Castilla La Mancha, Castilla y León y Galicia. Además, la inflación subyacente, la que excluye los productos energéticos y los alimentos frescos, ha escalado en la comunidad hasta el 5,6%, lo que anticipa una inercia difícil de detener en los próximos meses.
El coste de la energía por la guerra de Ucrania y el repunte de los precios de los carburantes son los dos factores que más han impulsado el IPC a cotas desconocidas en los últimos 37 años. Sin embargo, esto ya ha comenzado a trasladarse con fuerza a sectores como la alimentación, la industria, la construcción y algunos servicios. En este sentido, los paquetes turísticos y los alojamientos también han sufrido el impacto de la inflación, algo que se ha podido comprobar en los precios de la restauración, la hostelería y otros alojamientos vinculados con el sector turístico.
Por tanto, lo más lógico es que el incremento del coste de la vida lleve a los ciudadanos a apretarse el cinturón y a una reducción progresiva del consumo en los próximos meses. Este enfriamiento de la economía podría tener sus efectos también en el mercado laboral. Por ahora, las cifras de empleo reflejan un importante dinamismo de la contratación y de la afiliación a la Seguridad Social, aunque sería prudente esperar al final de la temporada estival para ver las consecuencias de la inflación en los datos de paro y ocupación.
El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, recordó hace unos días que la inflación es la mayor amenaza a la que se enfrenta España y Aragón. En el debate sobre el Estado de la Nación, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, sacó de la chistera medidas para tratar de aliviar las dificultades que está provocando un IPC desbocado. Son dos ejemplos que demuestran que este será el gran desafío, político, social y sobre todo económico que enfrenta España en los próximos trimestres.
