El Periódico de Aragón

El Periódico de Aragón

Normalizar anormalidades

Ya no sé si tengo enfado crónico o me hago mayor, pero cada día veo que el sistema es injusto en sí, y nadie hace nada.

Los diputados del congreso tienen que renovar teléfonos. ¡Pero oigan, que les pagamos el móvil! Y no cualquiera, los últimos modelos. No tienen bastante con un salario medio de 90.000 euros, sino que además les pagamos el teléfono de gama alta.

Fallece la Reina de Inglaterra y cuando está tomando posesión su hijo, hace un gesto hostil y prepotente de que le quiten unos bártulos de escritura de la mesa. El señor, lleno de medallas vestido de militar. ¿de verdad se ha ganado esos galones? Pero no es injusto ser monarca sin méritos, inviolable, que estas por encima de la ley. ¿Pero nos estamos oyendo? ¡Estas por encima de la ley!

Constitución española en vigor: «la persona del rey es inviolable y no está sujeta a responsabilidad». ¿Por qué es más que nadie? ¿Qué méritos tiene para poder estar por encima de la ley? Pongamos ejemplos: el rey atropella ebrio a alguien con su coche y lo mata y no lo pueden ni detener. ¿Pero eso es justicia?

El sistema de citas previas de las Administraciones. Hasta cuándo vamos a soportar un sistema nefasto, y lo más importante, que NO funciona. No funciona, vas a pedir cita en extranjería y es imposible, no hay citas nunca, registro civil lo mismo, tráfico ni lo sueñes, pero ¿por qué nadie toma medidas de ningún tipo?

¿Pero nadie se queja? Pero nadie hace nada. ¿Por qué nadie lucha por mejorar tanta injusticia? Pongamos un ejemplo: un día fui al registro civil, cogí número y espere cuarenta y cinco minutos a ser atendido, cuando me toco, un señor me dijo: Ha pedido cita previa, y le conteste que había cogido número, me recortó un papel y me dijo que esa es la página web para citas previas; lo mío era un certificado que lo sacas en un minuto cronometrado.

¿Y eso es normal? El problema de esta administración sobredimensionada, aparte de que nadie hace nada por cambiar, es que no existe un régimen disciplinario eficaz. Se imaginan estar en un trabajo que rindas o no rindas, hagas o no hagas te pagan igual. ¿Te imaginas un trabajo que cometas la negligencia que cometas nunca pasa nada? Pero hasta cuándo vamos a soportar este sistema que no funciona.

Y como letrado me preguntaran: ¿qué se puede hacer? Pues ya les adelanto, nada de nada. Escribir este artículo, cabrearme más si cabe, y seguir luchando allí donde vaya para intentar anestesiar, que no erradicar tanta injusticia.

La luz, el gas, el combustible y la cesta de la compra a unos niveles estratosféricos, pero hay que comprarles móviles gama alta a sus señorías. Debo ser un «rara avis» o no entender bien nada, porque pienso: «que se le compren ellos»; supongo que iré al infierno por ello, o tendré cien años de purgatorio por intentar la equidad y justicia que nunca veremos.

Compartir el artículo

stats