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Opinión | El artículo del día

¿Aumenta entre la ciudadanía el sentimiento de pertenencia a Europa?

Sánchez da un paso al frente en su visita a China y refuerza las relaciones de la UE (y de España) con el gigante asiático, la visita se realizó en un ambiente de respeto y sintonía con el líder chino, lo que representa una verdadera declaración de intenciones de cara a mantener estables las relaciones comerciales. Y lo hace con la lección de diplomacia bien aprendida, relanza las relaciones comerciales con Xi Jinping dentro del marco de la multilateralidad y del libre comercio, santo y seña de la UE. Y lo hace con una actitud indiferente ante los exabruptos e hipérboles a que nos tiene acostumbrados la Administración de Trump

La UE es consciente del momento tan complicado que estamos viviendo y se ha lanzado a abrir nuevas vías comerciales o a potenciar las ya existentes, las medidas manifestaciones de Von der Leyen, sin confrontar con Trump pero poniendo a Europa en su sitio, indican que aspiramos a continuar las relaciones con EEUU y, eso, a pesar de Trump, anteponiendo, en un claro ejercicio de responsabilidad, el país a un Presidente que tarde o temprano dejará sus responsabilidades.

Es bueno mantener ese discurso en defensa de la multilateralidad y en defensa de los organismos y acuerdos internacionales frente al despropósito de Trump y, es bueno que China se una a Europa en este discurso. Y es muy bueno para los intereses europeos ver cómo se afianzan las relaciones comerciales con Mercosur, con Nueva Zelanda, con Australia, con la India, con Canadá, con China ... cuanto más equilibradas estén las balanzas comerciales de Europa con el resto de países, menos dependeremos de los caprichos de Trump (y de los EEUU).

Sánchez ha sido un buen embajador de los intereses de la UE, pero también ha sido un buen embajador de los intereses de España para equilibrar la balanza comercial de nuestro país con China, estoy pensando en la carne del porcino, en el vino, en el aceite, en la digitalización e inteligencia artificial, en las baterías para los coches eléctricos, en el turismo...

La UE está plagada de contradicciones, es un proyecto aún inacabado que lo percibimos en cada paso que da, es un proyecto que el derecho a veto frena la toma de decisiones y tensiona a los países miembros, pero ahí está, y fuera de ella hace demasiado frío. Se percibe que con los ataques económicos de Trump a Europa y de sus continuos insultos ha aumentado la identidad europea y el sentimiento de pertenencia a Europa, cada vez se pone más en valor a la ciudadanía europea y no estaría nada mal que en el entorno del día de Europa, 9 de mayo, saliésemos a la calle con banderas europeas para defender los valores y el estado del bienestar que tanto molesta a Trump. 

Y que tanto nos costó construir a través de los numerosos Tratados iniciados en el ya lejano 1958 con el Tratado de Roma, donde se constituyó la Comunidad Económica Europea y se dotó de estructuras políticas permanentes europeas para iniciar un periodo de paz y de bienestar económico. Se inició una forma de hacer política donde los Acuerdos se basaban en el respeto a la diversidad política y cultural de los países miembros y, de esta forma, olvidarnos las numerosas guerras con las que resolvimos nuestros problemas a través de la historia.

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