Una gala con nombre de mujer

El Palacio de Congresosde Zaragoza ha vuelto a convertirse este jueves en el epicentro de la actualidad en Aragón, un escenario donde se pudo ver una amplia representación de la sociedad en una velada muy especial en la que, además de volver a reunir a unos mil invitados, cobraba un protagonismo muy relevante el talento femenino de la comunidad. Las chicas del Casademont Zaragoza están de moda, de eso no ha quedado ninguna duda. Las flamantes campeonas de la Copa de la Reina 2023 de baloncesto se han alzado con el premio de Aragonés General del Año y se han ganado con facilidad al público después de haberlo hecho ya con los lectores de EL PERIÓDICO DE ARAGÓN que les votaron. Y Soledad Puértolas ha demostrado una vez más por qué es toda una referencia para todos en Aragón y ha emocionado al imponente auditorio tras recibir el premio de Aragonesa de Honor.

Y es que la cita de este jueves a orillas del Ebro ha demostrado que no todo es política y elecciones en esta vida. Por más que la proximidad de las elecciones ha brindado a los invitados a la edición de este año quizá la única oportunidad de ver a todos los candidatos que a partir del día 12 se enganchan a una campaña electoral en la que nadie conoce a nadie.

Ese morbillo de ver a Javier Lambán y a Jorge Azcón –este año sí como candidatos oficiales de PSOE y PP a la Presidencia de Aragón– en los corrillos previos y posteriores a la ceremonia antes de su cita con las urnas del próximo 28 de mayo. O de ver juntos a casi todos los miembros de un Gobierno cuatripartito –solo ha faltado la líder de Podemos en Aragón, Maru Díaz– que será una imagen irrepetible porque algunos de ellos ya no repetirán en la próxima legislatura porque dejan la política, como el vicepresidente de la comunidad, Arturo Aliaga. O del reencuentro (o no) de algunos de los que hasta hace poco estaban bajo el mismo paraguas del PAR o Cs, antes de partir peras...

Pero si algo tienen citas como los Aragoneses del Año es que es capaz de que hasta los políticos abandonen sus rencillas por unas horas y se den la mano con la sociedad a la que representan. Departan amigablemente con otras caras conocidas del mundo de la empresa, la cultura, el deporte, la ciencia, el tejido social... Celebren los galardones de los premiados, reconozcan el mérito de quienes están ahí por su talento y aupar a Aragón a las cotas más altas en la materia. Y se han entremezclado una vez más para darse la mano en una gala en la que todos eran parte importante de la fiesta.

Atrás quedaron las restricciones de la pandemia de años pasados. La normalidad que se recuperó en 2022 este jueves ha sido todavía más palpable. Besos, abrazos, cercanía y muchos corrillos de invitados. Ya sin mascarillas, distancias mínimas o limitaciones de aforo... El de este día ha vuelto a ser el evento de los de siempre. En el que también ha brillado el rock del grupo emergente zaragozano Velta, los vinos de la Denominación de Origen Campo de Borja o la mejor gastronomía del grupo aragonés La Bastilla. Talento de la tierra en cada rincón del Palacio de Congresos de la Expo.

Ahora, solo queda esperar a la gala de 2024.