Agapito Iglesias, presidente y accionista mayoritario del Real Zaragoza, ha decidido dejar el G-6, que ahora se ha quedado reducido a cinco integrantes (Sevilla, Valencia, Athletic, Villarreal, Real Sociedad) para alinearse con el G-33, donde hasta su incorporación había 32 clubs comandados por los dos grandes (Madrid y Barça), con el objetivo de asegurarse el cobro de una ayuda superior en el caso de que el conjunto zaragocista, ahora mismo colista destacado de Primera, acabe descendiendo. Estando dentro del G-33 recibiría alrededor de 10 millones de euros en caso de bajar, mientras que con el G-6 esa cifra rondaría los 3 millones. Esta última cantidad se recibe a través de la Liga como ayuda por el descenso, mientras que el G-33 aporta otros 7 millones. El Zaragoza ya recibió solo 3 millones cuando bajó en la campaña 07-08.

Todo apunta a que el Real Zaragoza se ha visto obligado también a cambiarse de grupo como contraprestación por la decisión de la LFP de adherirse a la Propuesta Anticipada de Convenido (PAC) de la entidad zaragocista. El Zaragoza dio a conocer el lunes que había formalizado su entrada el G-33. "Entre otras disposiciones, el G-33 propone que en las próximas temporadas se limiten las diferencias en los ingresos que los clubs perciben por conceptos audiovisuales, para lograr una competición más equilibrada; favorecer y mejorar los ingresos de los equipos de Segunda División y formalizar una ayuda para aquellos clubs que desciendan de Primera", se hacía constar en la página web del club aragonés.