No ha habido una guinda en el mercado de invierno del Real Zaragoza, que ya había cerrado antes de llegar a la recta final, al último día, las cesiones de Álex Alegría, Peybernes y Sanabria, y que no logró sacar a Haris Vuckic para liberar margen salarial suficiente para que llegara un extremo, un jugador de ataque para la banda que diera más pólvora a un Zaragoza escaso de ella. Había pocas esperanzas en que el punta esloveno saliera en las últimas horas y esa sensación se confirmó de pleno para que a última hora de la tarde de este lunes el Zaragoza diera por finiquitado un mercado que el martes explicará el director deportivo, Miguel Torrecilla.

El delantero, con un salario anual de 480.000 euros y que lleva dos partidos sin ser convocado, no ha querido salir en este mercado pese a que sabe desde hace días que sus opciones de jugar serán escasas. Sus agentes, la agencia SEG, no le han encontrado acomodo en Holanda, donde tiene cierto cartel tras su última temporada en el Twente, con 11 goles, ni en Bélgica y también ha sido ofrecido en Francia, Turquía o Chipre, en algunos de esos destinos sin asumir la mitad de la ficha del jugador y solo una parte de ella.

La vía del Oviedo

Con todo, en España, pese a que en 15 partidos oficiales entre Liga y Copa, siete de ellos de titular, con 601 minutos, no ha visto puerta, ha tenido algunas opciones de última hora. El Oviedo estudió su cesión y abrió esa posibilidad tras la salida de Rafa Mujica a Las Palmas, el Alcorcón también lo tuvo sobre la mesa y el Sporting lo tenía como una de las alternativas, no la mejor colocada, si al final no lograba el fichaje de Campuzano (Espanyol), que sí que logró. Ninguna de esas vías se dio y Vuckic, con contrato hasta el 2023 y el quinto delantero ahora tras Narváez, Alegría, el Toro e Iván Azón, se queda hasta junio sabiendo que apenas va a contar y con un rendimiento muy discreto cuando ha jugado.

La salida de Vuckic era la única que podía producirse este lunes, aunque el ariete no había dado ni una sola señal de dar su brazo a torcer. Estaba asumido ya hace días que Gaizka Larrazabal tampoco iba a marcharse, porque para su adiós hacía falta la autorización del Athletic y el jugador tampoco quería irse. Mientras, por James Igbekeme no ha habido ninguna oferta de traspaso para estudiar. Tampoco se dieron otros traspasos, con la oferta del Elche de dos millones por Juanjo Narváez, o con el interés, sin propuestas en firme, por otros jugadores como Francho, Francés o Chavarría. Con todo ello, el Zaragoza había consumido ya su límite y no tenía margen para incorporar a ningún futbolista más, por lo que la única novedad en el último día del mercado fue la inscripción de Francés con ficha del primer equipo, trámite que cumplió LaLiga al mediodía para que el canterano herede el dorsal 6.

Si hubiera liberado ese margen salarial, Torrecilla había trabajado el mercado de extremos en los últimos días buscando una cesión de un equipo español. Waldo Rubio (Valladolid) fue una de las opciones estudiadas, aunque el jugador no quiso salir del club pucelano, como tampoco Dani Raba del Villarreal. También hubo movimientos antes con Javier Avilés (Leganés), al que ahora Asier Garitano le va a dar más protagonismo, y existieron alternativas quiméricas como la de Aitor Cantalapiedra, con un salario inasumible en el Panathinaikos y al que tampoco el club griego iba a dar salida.

El Zaragoza se queda así con 22 jugadores con ficha profesional, incluido Francés, además de Sanabria, Iván Azón, Francho y el meta Carlos Azón, que están en dinámica del primer equipo. Ha cambiado en el eje de la zaga a Guitián por Peybernes y siguen Jair, Francés, ahora titulares, y Atienza. Mantiene la portería con Cristian y donde Ratón estuvo cerca de salir y los laterales (Vigaray, Nieto, Tejero y Chavarría). En la medular, las molestias en la rodilla de Ros, la salida de Jannick y el ocaso de Zapater se ven compensadas con la llegada de Sanabria, que puede jugar también en banda. De James se espera una mejoría física y Eguaras y Francho son fijos ahora en el medio.

Es en las alas del ataque donde más carencias hay. Zanimacchia y Larrazabal apenas han demostrado virtudes y en la izquierda está jugando Juanjo Narváez ahora y lo ha hecho en muchas ocasiones Chavarría, dos jugadores reconvertidos en ese puesto. Con Bermejo, y Adrián para la mediapunta, el déficit está en el gol, donde Álex Alegría es la apuesta para paliar una escasez en esa faceta que solo ha aliviado Juanjo Narváez, autor de 7 de los 15 goles del equipo. El Toro, que no ha visto puerta aún, ya se quedó en el banquillo ante la Ponferradina, Iván Azón ha perdido peso con la llegada de JIM, que ha optado por la mayor veteranía en ataque, y la presencia de Vuckic va a ser testimonial tras su negativa a salir y por tener hasta cuatro delanteros por delante.