Todo apunta a que la temporada concluirá sin público en los estadios de Primera y Segunda y en los pabellones de los equipos ACB. El Gobierno central sigue sin contemplar la vuelta de los aficionados en las únicas categorías en las que se mantiene la puerta cerrada, por lo que La Romareda y El Alcoraz, así como el pabellón Príncipe Felipe, continuarán, en principio, cerrados a cal y canto para los primeros equipos de Real Zaragoza, Huesca y Casademont Zaragoza masculino.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, afirmó este lunes que no ve «aconsejable» la vuelta del público a los estadios de fútbol en lo que queda de temporada debido a la distinta situación epidemiológica de las comunidades autónomas. En Oviedo, donde visitó el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), Darias recordó que la incidencia acumulada a catorce días en España está en 229 casos por cada cien mil habitantes, pero con «una variabilidad muy importante» entre las distintas comunidades autónomas. Así, hay algunas autonomías con una incidencia acumulada por debajo de 70 casos, mientras que otras están próximas a los 400 e incluso por encima de 500. De este modo, en respuesta a una pregunta sobre la posible vuelta del público a los estadios de fútbol en el tramo final de la temporada, Darias considera que «no sería igual en todo el territorio español» y que no lo ve adecuado: «Lo que queda de tramo creo que no sería lo más aconsejable», dijo.

La declaración de intenciones del Gobierno encendió a LaLiga, que, después de varios meses de silencio, mostró el pasado jueves por primera vez su malestar con el criterio del Gobierno sobre el paulatino acceso del público a los estadios. La pandemia obligó a prohibir la entrada de los aficionados a los estadios de clubs profesionales, en Primera y Segunda División, pero LaLiga entiende que es el momento de aclarar desde la Administración «por qué la salud es diferente para el Gobierno y las comunidades autónomas, siendo incluso muchas de ellas del mismo partido», según fuentes de LaLiga, cuyo presidente, Javier Tebas, esperaba ya ver «entre un 10% y un 25% de los aforos en las últimas jornadas de ambas competiciones». 

Este lunes, LaLiga, en respuesta a las declaraciones de la ministra de Sanidad, afirmó que se trata de una decisión «discriminatoria e incoherente», que espera que se «reconsidere» y pide una reunión urgente con la ACB, «la otra gran perjudicada». LaLiga, que solicitó la vuelta del público «según la situación sanitaria de cada comunidad autónoma, relegando sobre ellas la decisión final y respetando todas las medidas oportunas, al igual que está ocurriendo hasta el momento con diversos espectáculos deportivos y de cualquier otra índole», expuso, además, que «la solicitud de la vuelta del público a los estadios ha sido aprobada por unanimidad por la Comisión Delegada de LaLiga». Esta, compuesta por 14 de los 42 clubs que forman el organismo, habría adoptado esta decisión «incluso teniendo en cuenta y siendo conscientes de que habría clubs que podrían no tener público, si así lo requiriese su comunidad autónoma».

Los clubs «consideran que esta situación no afecta a la integridad de la competición» y LaLiga «va a intentar que se reconsidere esta decisión de forma urgente, convocando una reunión inmediata con la ACB, que es la otra gran perjudicada por esta medida que consideramos discriminatoria e incoherente», concluye el comunicado emitido ayer por el organismo futbolístico.

La nueva negativa de Sanidad coincide con el anuncio de la UEFA de que hasta un total de 9.500 espectadores podrán asistir en directo el próximo 26 de mayo a la final de la Liga Europa que se disputará en el estadio de Gdansk (Polonia). «Las autoridades polacas han confirmado a la UEFA una capacidad del 25% del estadio o hasta un máximo de 9.500 espectadores», señaló la UEFA. Cada finalista recibirá 2.000 localidades, mientras que otras 2.000 serán puestas a la venta al público general a través de UEFA.com.