En una decisión envuelta en polémica, el Gobierno central decidió este miércoles abrir la puerta de los estadios a los aficionados pero solo en cuatro comunidades: Murcia, Comunidad Valenciana, Galicia y Baleares, lo que deja a Aragón sin público en las gradas, en principio, hasta la próxima temporada. Así lo anunció el ministro de Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, en una medida que condena a Real Zaragoza, Huesca y Casademont Zaragoza al estar Aragón en la fase 3 de la escala que marca la evolución de la pandemia, lejos de la fase 1 en la que se encuentran las autonomías a las que el Estado sí permite la apertura, que deberá ser de un 30% del aforo y un máximo de 5.000 personas. 

De este modo, el partido de la penúltima jornada ante el Mallorca en la isla será el único de los cuatro que le quedan por jugar al Zaragoza en el que habrá público, mientras que la medida beneficia a rivales directos del equipo aragonés en la lucha por la permanencia. Lugo, Cartagena y Castellón sí podrán contar con el apoyo de su afición. Este fin de semana, por ejemplo, habrá seguidores en el Castellón-Ponferradina y el Lugo-Mirandés. Ambos se juegan el sábado a las 16.00 y a las 18.30 horas. «Tenemos que ir partido a partido. En tiempo real. Hoy es una situación y parece que vamos a mejor y el planteamiento es que va a ser más amplio», dijo Uribes, que añadió que «no son todos los partidos, pero es una muestra significativa de dar el paso de escuchar a LaLiga y a los aficionados para marcar el rumbo». En Primera se abrirá la puerta en el Valencia-Eibar y el Villarreal-Sevilla, el próximo fin de semana y Elche-Athletic, Levante-Cádiz y Celta-Betis el siguiente.

Cada región estará sujeta a los cambios que puedan surgir de la evolución de la pandemia y, en el caso de mejorar los datos en una comunidad, esta podrá albergar encuentros en sus estadios, según informó Uribe. En todo caso, tendría que ser con tiempo: «Si se produce el mismo día del partido (la mejoría de los datos oficiales) no se va a poder resolver, pero dos días antes sí se podrá resolver», explicó antes de rechazar cualquier agravio comparativo. Uribes reconoció que preguntó a LaLiga por esa situación y desveló que esta contestó que todos los equipos estaban de acuerdo con la medida. «Todos los clubs están de acuerdo en que el público vuelva, el significado simbólico era el más importante. Si ellos son los que tienen que tomar esa decisión la asumen, está resuelto porque han aceptado las normas del juego. Pregunté dos veces y en LaLiga me contestaron que estaban todos de acuerdo», dijo.

La medida, sin embargo, sentó como un jarro de agua fría en el seno del Real Zaragoza, que horas antes había solicitado a la DGA su mediación para convencer al Gobierno estatal de la necesidad de abrir los estadios al público tras catorce meses de clausura. El club se había dirigido al Ejecutivo autonómico y enviado un comunicado al Consejo Superior de Deportes (CSD) solicitando la apertura de La Romareda al público para los dos últimos partidos que disputará el equipo aragonés en casa esta temporada (ante Castellón, la próxima semana, y frente al Leganés en la última jornada del campeonato). «El presidente del Real Zaragoza, Christian Lapetra, ha remitido sendos escritos al consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, y a la consejera de Sanidad, Sira Repollés, en los que solicita su colaboración y mediación ante el Consejo Superior de Deportes para que se permita la entrada de aficionados al estadio municipal de La Romareda para los partidos del primer equipo», explicó la entidad en un comunicado oficial. «Además, Christian Lapetra se ha dirigido también al presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Franco, para pedirle la puesta en marcha de las iniciativas que se consideren oportunas para garantizar la entrada de seguidores al estadio», añadió.

El dirigente zaragocista habría expuesto tanto a la DGA como al CSD que el Real Zaragoza «ha adoptado las medidas imprescindibles para evitar la expansión de la pandemia y la disputa de los partidos a puerta cerrada, lo que ha supuesto un serio quebranto para el club» y estima que «la apertura que se lleva a cabo en otros ámbitos de la cultura y el espectáculo obliga también a revisar la posibilidad de que los espectadores puedan acceder al estadio de La Romareda».

Sin embargo, fuentes del Ejecutivo autonómico consultadas por este diario recordaron, ante la solicitud del club, que «Aragón, en su ámbito competencial, ha actuado y favorecido la presencia de público siempre de acuerdo a la situación sanitaria, pero en las Ligas nacionales no tenemos competencia».

Horas después, el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, anunciaba que las dos últimas jornadas de LaLiga, en las zonas que se encuentren en fase uno de la pandemia, y lo que queda por disputar de la Liga Endesa de baloncesto, volverán a contar con espectadores en sus estadios y pabellones.