En medio del parón absoluto que vive el club en su planificación deportiva a la espera de la llegada la nueva propiedad, el Real Zaragoza va dando pequeños pasos. Marc Aguado y Federico Bikoro, dos de los cedidos en la pasada temporada, no comenzarán los entrenamientos con total seguridad a las órdenes de Juan Ignacio Martínez. El centrocampista de la cantera está a expensas de que se haga oficial en los próximos días su cesión al Andorra, donde ya estuvo el curso pasado, y el medio ecuatoguineano, que estuvo primero en el Numancia y después en el Badalona, busca acomodo en la Primera RFEF, pero en caso de no encontrarlo antes del 6 de julio sus vacaciones se prolongarán para encontrar destino, ya sea tras rescindir, la opción que prefiere el club, o con una nueva cesión.

Marc Aguado renovó el pasado 31 de mayo su compromiso por dos años más, hasta 2023, por la insistencia del Andorra en su fichaje y porque se hace cargo de la totalidad de la ficha, que es la del mínimo salarial en la categoría de plata. Ya cuando renovó estaba claro su destino, y así lo anunció este diario, y no va a haber sorpresas y jugará en la Primera RFEF. Es verdad que JIM quería ver al jugador en la pretemporada, aunque al final no será necesario y el jugador, hijo del mítico Xavi Aguado, comenzará la preparación en el club andorrano y no se calzará las botas en la Ciudad Deportiva.

Marc Aguado, en su debut en Copa ante el Nástic de Tarragona. CARLOS GIL-ROIG

Tampoco lo hará Bikoro, fichado en 2019 por cuatro años desde el Teruel y que solo ha jugado un partido de Copa con el Zaragoza desde entonces. En la temporada 19-20, Bikoro se marchó cedido al Badajoz al no contar para Víctor Fernández y en la que acaba de terminar ha estado en el Numancia, donde apenas jugó, y en el Badalona, con 13 partidos en el conjunto catalán desde enero. Su destino está en un club de Primera RFEF.

Baselga y Jannick

Mientras, Marcos Baselga, que ha estado cedido toda la campaña pasada en el Atlético Baleares, también va a salir, en este caso seguro en forma de cesión, pero si no ha encontrado destino en Primera RFEF antes del 6 de julio comenzará con el Zaragoza hasta encontrar una salida. Tiene contrato el punta hasta 2024, lo mismo que Jannick Buyla, que regresa tras un buen papel desde enero en el UCAM Murcia, pero que también sabe que volverá a salir, quizá ya con la desvinculación bajo el brazo. En todo caso, parece seguro que Jannick comenzará la pretemporada a las órdenes de JIM.

De los cedidos, restan Enrique Clemente, pendiente de su renovación, comunicada en las intenciones pero aún no negociada y que se queda seguro tras un año en el Logroñés, y Dani Lasure, en el tramo final de su recuperación de un tumor testicular y al que aún le quedan varios meses para volver a competir, aunque tendrá sitio fijo en la plantilla zaragocista tras su año de préstamo en el Leganés. A Mingotes, que estuvo cedido en el Mestalla, ya se le ha comunicado que no se ejerce su renovación opcional por tres años más.