El Real Zaragoza afronta desde este lunes, en su tercera semana de pretemporada y después de empezar el trabajo veraniego el 7 de julio, el tramo decisivo de la preparación, con el viaje a San Pedro del Pinatar (Murcia) este jueves, para permanecer allí durante nueve días, hasta el 30, elevando el nivel de los rivales de los amistosos, todavía inéditos tras suspenderse el de Teruel por el positivo de Clemente, y con la sensación, y más que eso, de que la plantilla está todavía en pañales, que quedan demasiados y profundos cambios en su configuración, lo que sin ninguna duda desvirtúa el trabajo que está haciendo en esta pretemporada el equipo de JIM de cara al inicio liguero, el 13 de agosto ante el Ibiza.

Esta semana debería marcar por fin el desembarco de la nueva propiedad. Solo así se puede entender el fichaje de Fran Gámez o el avance en otras negociaciones. Con todo, ninguna está lo suficientemente a punto para que se cierre antes de viajar el jueves a tierras murcianas. Ni siquiera la del central Peybernes, que sigue entrenándose al margen en el Almería y con su salida enquistada con amenaza de dejarle un año sin jugar tras una, por ahora, mala negociación de sus representantes con el club andaluz. Al galo se le va a esperar, porque se le considera un pilar fundamental para la zaga, pero es verdad que este fichaje, por dos años más otro opcional, se está complicando mucho más de lo que se preveía.

Al Zaragoza tienen que llegar al menos seis refuerzos más, un mediocentro, dos jugadores de banda y dos o tres puntas, si se va Narváez, y hasta un lateral polivalente previendo un traspaso de Chavarría o un portero en función de Ratón, cuya salida ahora no es tan factible. Y hay que dar no menos de cuatro salidas (Larra, Vuckic, Baselga o Bikoro), además de lo que dicte el mercado. Sin embargo, salvo la despedida del centrocampista ecuatoguineano, mediante una desvinculación, nada parece tan inminente como para que alguno de ellos no viaje a San Pedro del Pinatar el jueves a primera hora para realizar la primera sesión ese día por la tarde. 

El Zaragoza jugará el martes, tras el susto por el positivo de covid de Clemente, ante el Calahorra (19.30 horas), enemigo de Primera RFEF, y el jueves viaja a Murcia. Allí irán los 20 jugadores del primer equipo disponibles, teniendo en cuenta que el central no puede viajar porque debe guardar confinamiento hasta el 27, y que Vigaray está pendiente de su operación de rodilla y Lasure se encuentra dando sus primeros pasos tras superar su tumor testicular. Con estos dos últimos lo normal es que no viajen a tierras murcianas. Irán seguro los cinco jugadores del Aragón que están fijos con el primer equipo, el meta Acín, Ángel, Pablo Cortés, Carbonell y Javi Hernández, es factible que vayan Puche y Castillo y mucho más que lo haga otro central del Aragón para completar cuarteto con Jair, Francés y Javi Hernández.

En Pinatar Arena sube la exigencia en los amistosos. El sábado espera el Elche (21.00 horas) y el miércoles 28 el Valencia (18.45), dos rivales de Primera, para cerrar el stage el 30 (19.00) ante el Atromitos griego, que curiosamente fue goleado este sábado por el equipo ilicitano (6-1).