Dos meses han pasado desde que acabó la Liga y menos de otro queda hasta que el 31 se cierre el mercado, aunque el campeonato comienza en 12 días, el día 13 de este agosto, y el Real Zaragoza es ahora mismo y sin discusión el equipo más rezagado en la confección de su plantilla. Solo un fichaje y no menos de seis, pero probablemente más, por hacer, además de dos salidas fijas (Vuckic y Larra) y otras que dictará el mercado (Juanjo Narváez o Chavarría). El Valladolid, con 34 futbolistas en una plantilla de elevado nivel tras bajar de Primera, es el único que lleva menos fichajes que el Zaragoza, aunque su contexto es radicalmente diferente a un equipo con 21 jugadores ahora del primer equipo, si bien con Lasure y Vigaray no se puede contar prácticamente hasta enero, sobre todo con el lateral madrileño, que aún debe pasar por el quirófano para operar su maltrecha rodilla.

A Miguel Torrecilla le queda un mes frenético y de momento ya ha visto cómo varios objetivos primordiales se escapaban por la escasa capacidad económica pendiente del desembarco de Spain Football Capital. El último en hacerlo ha sido Peybernes, rumbo al Málaga, el siguiente será Luismi, que está cerca del Oviedo aunque Las Palmas ha irrumpido con fuerza con una oferta mucho mejor que la que tenía el Zaragoza para el centrocampista del Elche. En esas está el director deportivo del club aragonés, confiado en que el mercado se acelerará y enloquecerá a partir del 15 de agosto, que la renovación de Messi en el Barcelona tendrá un efecto para abrir la mano más en todos los clubs con el 'fair play' financiero y esperando que, en su Zaragoza, haya un efecto dominó y que el primero que dé el paso para venir a La Romareda arrastre a más.

Eso no ha pasado con Fran Gámez, incorporación única y cerrada el 15 de julio tras desvincularse del Mallorca. JIM anunció tras jugar ante el Atromitos el viernes que había varios fichajes casi cerrados y que solo se habían parado unos días. Claro que uno de ellos era el de Peybernes y ya ha puesto rumbo a La Rosaleda, pero en todo caso esta semana sí se esperan novedades en los refuerzos, sobre todo en el frente de ataque, en la delantera, donde Cristo González y Borja Garcés son los complicados y primeros objetivos, o en los costados, donde Ibai Gómez es una quimera.

Los números globales

Pero, a 1 de agosto, la Segunda ha hecho 127 operaciones de fichajes, 28 de ellas en forma de cesión y el Zaragoza solo lleva una, las mismas que el Sanse, la Real Sociedad B, un filial recién ascendido que se nutre de jugadores que suben de su cantera y al que han bajado del primer equipo el zaragozano Roberto López y Luca Sangalli y ha llegado Pokorny (Salzsburgo).

Nada que ver con los 13 fichajes del Eibar, recién descendido y que ha hecho tres de los cuatro traspasos monetarios (Óscar Sielva, Corpas y Stoichkov), ya que el otro son los humildes 15.000 euros que pagó Las Palmas al Cartagena Raúl Navas.  El Mirandés, con 11 refuerzos, y la Ponferradina, con el mismo número y tres de ellos guardametas, les siguen a los armeros, mientras que el Amorebieta, un recién ascendido a Segunda y que lleva menos tiempo para confeccionar su plantilla por ese motivo, suma 10. Hasta ocho se eleva el Cartagena, que le quitó al Zaragoza un objetivo como Álex Gallar y con siete ya estarían el Alcorcón, el Ibiza, Las Palmas y el Málaga, que le ha arrancado a los zaragocistas dos, Paulino y el mencionado Peybernes.

El problema de Torrecilla

El Zaragoza lleva, pues, un retraso considerable en confeccionar su plantilla, aunque es cierto que Torrecilla ha diseñado hasta tres escenarios, uno, el más modesto, en el que se está moviendo ahora, y que maneja un buen puñado de alternativas en cada puesto a reforzar. Pero tiene mucho trabajo por hacer y, sobre todo, no cuenta con la baza aún de la llegada de los nuevos propietarios para que el futbolista que vaya a venir les ponga cara y ojos, ya que si eso no sucede las dudas son inevitables, y hasta razonables, y además ese desembarco con la inversión que traería permite elevar el límite, en principio hasta los 10 millones, algo más de un millón más que el curso pasado, donde se situó en 8,8.

Pero, mientras tanto, el Zaragoza camina a ritmo de tortuga, sin alcanzar al Huesca, al Leganés o al Girona, que suman tres refuerzos. Y el club necesita en principio otro lateral, un central, un mediocentro, uno o dos jugadores de banda y dos o tres delanteros, en función de la salida de Juanjo Narváez. Casi nada. Sobre todo, en su parte de ataque, ya que el gol es lo más difícil y lo más caro en el fútbol. Eso sí, hasta 12 equipos de Segunda han fichado delanteros, pero no el Zaragoza aún.