Medio millón de euros de margen para los dos refuerzos ofensivos

El Real Zaragoza dispone ahora mismo de alrededor de medio millón de euros para afrontar los dos fichajes ofensivos que tiene en mente Miguel Torrecilla, director deportivo, y que ha reconocido el técnico Juan Ignacio Martínez, que habló el pasado jueves de esas dos incorporaciones, de “las guindas que faltan por llegar”. Son, por el perfil buscado, un delantero rápido, que vaya al espacio y que gane duelos, y un centrocampista ofensivo, un futbolista con llegada y que también se pueda desenvolver como mediapunta, dos refuerzos que aumentarán el nivel del ataque zaragocista y que deberían cerrar la plantilla salvo que llegue una venta como la de Juanjo Narváez, cada vez más difícil, que obligaría al club a ir a por un extremo preferentemente de perfil zurdo antes que a por otro delantero nato, o la de Chavarría, descartada en la práctica a estas alturas.

Ese medio millón de euros no es demasiado margen para dos jugadores ofensivos que eleven el nivel, teniendo en cuenta que el gol es lo más caro del fútbol. Eso sí, el Zaragoza no va a tener prisa, va a esperar a los últimos días de mercado, del que quedan 10 días al cerrarse el 31, y a alguna cesión de algún equipo de Primera, donde se espera un 'efecto dominó' en la recta final de una ventana que no ha tenido demasiados movimientos, o a un futbolista libre, porque las opciones del extranjero están en un plano secundario y solo se irá a ellas si no hay alternativas que conozcan la categoría de plata o, al menos, el fútbol español.

Candidato Cristo

En la delantera el candidato claro es Cristo González, una cesión desde el Udinese en la que Torrecilla lleva trabajando desde el principio del mercado, teniendo en cuenta que el delantero es una vieja aspiración del ejecutivo salmantino desde que estaba en el Sporting como director deportivo. Aún no ha decidido el club italiano sobre el punta canario, que ha convencido al técnico Luca Gotti en esta pretemporada. Si ficha a otro ariete, Cristo saldrá seguro y, a pesar de la competencia del Almería o del Sporting, el Zaragoza cree que si deja el conjunto italiano llegará a La Romareda, absorbiendo el club aragonés una parte de su ficha, que no toda, porque se acerca al millón de euros.

Una alternativa que gusta es Hugo Duro, pero tanto desde el Getafe como desde el entorno del futbolista se tiene claro que el jugador, salvo giro imprevisto, no va a salir cedido. En la lista de prioridades, el delantero está por delante del centrocampista ofensivo, donde aún más se esperará a una oportunidad de mercado en los últimos días y en teoría se destinará menos cantidad de dinero que al fichaje de ese ariete.

Salidas de Larra y Ros

Para aumentar ese margen y con los traspasos de Narváez o Chavarría en vía muerta y más que difíciles en estos momentos, es vital dar una salida a Larra o a Javi Ros. Otra cosa es que se pueda lograr y en qué condiciones. En el caso del extremo vasco, con una situación enconada y atascada en el Zaragoza, tiene el interés, sin oferta concreta, de clubs como el Tenerife, el principal candidato, el Amorebieta o el Ibiza, pero en ningún caso llegarían a los 350.000 euros que tiene en su ficha si obtienen su cesión. Ni de lejos. Y el jugador no quiere irse al extranjero. Con Ros hay poco que negociar, no desea marcharse y su postura es firme, no se va a mover salvo despido de por medio con indemnización de los dos años que le restan de contrato, teniendo en cuenta que el navarro, que lleva en la entidad desde el 2016 y es el segundo capitán, siempre es un futbolista que suma en el vestuario y no se va a ir por parte de la SAD a ningún conflicto con él.

Las salidas de ambos, liberando su salario, supondrían unos 600.000 euros más de margen, pero ni en los mejores sueños de Torrecilla se va a disponer de ese cómputo para sumar al medio millón que ahora tiene el director deportivo para rematar la plantilla. El ejecutivo, que hablaba de tres escenarios en julio en el límite salarial, ha tenido que trabajar en el intermedio, ya que la inyección que se esperaba por el desembarco de Spain Football Capital no ha llegado, y habrá que ver si lo hace, aunque no será a tiempo para aumentar las opciones económicas en este mercado de fichajes. “La operación, en lo que se refiere a sus detalles contractuales, está cerrada desde hace tiempo. Falta la rúbrica y la llegada de los fondos”, dijo el presidente, Christian Lapetra, el pasado 4 de agosto. Y ahí sigue.

Con ella, el límite salarial hubiera rondado los 10 millones, pero al menos el Zaragoza ha contado con el aplazamiento del pago anual del concurso y con los fondos del crédito de CVC negociado por LaLiga, que para el club aragonés suponen un total de 12,8 millones, de los que casi dos, el 15%, se pueden destinar al límite salarial, ya sea en una vez o repartidos en hasta tres años.

Torrecilla se ha movido hasta ahora en ofertas que han rondado los 250.000 euros anuales, que convencieron a Lluís López o a Fran Gámez, mientras que Petrovic o Álvaro Giménez requirieron de un esfuerzo algo superior, más cercano al medio millón. Con ese margen ha convencido a cuatro jugadores de equipos de Primera (Fran Gámez, Lluís López, Álvaro Giménez y Borja Sainz) y a un descarte de un club potente de Segunda como el Almería (Petrovic) lo que habla bien de su trabajo, siempre priorizando los refuerzos con experiencia en España y teniendo en cuenta que el proceso de venta de la SAD le paralizó durante semanas y que al no darse no es nada sencillo convencer a futbolistas para que lleguen al Zaragoza. No han sido pocas las primeras opciones que se han quedado en el camino, pero en la entidad blanquilla andan satisfechos con lo logrado para reforzar la plantilla. Ahora, al ejecutivo salmantino tiene por delante el reto de rematarla, un broche con dos guindas para el que, ahora mismo, cuenta con en torno a medio millón de euros.