La salida de Luis Carbonell, que el club no ha hecho ni va a hacer oficial al tratarse de un jugador juvenil, ha sido, sin duda, una de las operaciones más polémicas del verano. La marcha del canterano, que se marcha cedido al Real Madrid cedido con una opción de compra de 1,5 millones ampliable según varias variables, ha provocado malestar en un sector de la afición, pero Torrecilla asegura que la maniobra es positiva para el club. «Es una muy buena operación para el Zaragoza más allá de esa opción de compra y de lograr que ese talento pueda llegar de manera más estable», afirma el director deportivo en referencia a la ampliación, hasta el 2024, del contrato del jugador. 

En este sentido, Torrecilla repasó una operación que culminó el pasado martes. «Estudié su contrato cuando llegué al club y me senté con él en verano para explicarle la idea del club, consensuada con el entrenador, de que fuera jugador del Deportivo Aragón entrenando con la primera plantilla», explicó el director deportivo. «Tenía contrato con el Aragón como jugador de la cantera hasta final de esta temporada y luego un año más en la primera plantilla y, cuando surge la posibilidad de que el Madrid lo quiera cedido, hay una negativa inicial a la primera oferta que nos pasa su agente porque, aunque a nivel competitivo podía ser algo muy interesante, nunca se podía ir sin renovar ese contrato ya que, cuando volviera, le quedaría solo un año y sería libre en enero para negociar con cualquier equipo», justificó.

De ahí que el Zaragoza impusiera la renovación para aceptar su salida hacia Valdebebas. «La opción de compra incluye unas variables factibles de lograr que engordan esa cantidad inicial pero lo más relevante es la garantía de que no llegaría con solo un año de contrato pendiente, sino varios. Es una muy buena operación», insistió el director deportivo.

El club justificó el hecho de no haber hecho oficial la operación en que «no lo hacemos con juveniles, como tampoco lo ha hecho el Real Madrid». En este sentido, subrayó que «el talento debe llegar al primer equipo y romper la puerta. Carbonell estaba en dinámica del filial y le intentamos ayudar en hábitos personales y de todo tipo para que pueda llegar a ser profesional, algo que puede ser a tenor de su talento». 

El desenlace, en todo caso, satisface los intereses de la entidad, según Torrecilla. «Vino a verme con un familiar y sin su agente. Le explicamos la situación, pero todo cambió con una última llamada con Manu Fernández, director de cantera del Real Madrid, al que agradecemos que aceptara nuestras condiciones, distintas a las primeras que nos pasó el agente», añadió.