El Real Zaragoza sigue teniendo un serio problema con el gol. Los tres tantos materializados por el equipo aragonés en las cinco primeras jornadas del campeonato suponen la peor marca de la historia de la entidad en Segunda, ya que, hasta ahora, los cuatro de las campañas 13-14, 14-15 y 17-18 eran el registro más bajo de todos los tiempos. El Zaragoza actual ha roto otro récord merced a una extrema falta de puntería que le llevó, por ejemplo, a marcar solo de penalti en Fuenlabrada a pesar de contar con numerosas ocasiones de gol.

Solo una vez en toda su historia había marcado menos tantos a estas alturas. Fue en la temporada 1990-91, cuando el equipo, entonces en Primera División, apenas había celebrado dos dianas en las cinco primeras jornadas. Esa campaña, el Zaragoza acabó disputando el playoff de descenso a Segunda ante el Cádiz, que fue el que bajó de categoría. En Primera, esas tres dianas también fueron las únicas logradas en siete temporadas (52-53, 70-71, 84-85, 86-87, 95-96. 2003-04 y 2010-11).

En Fuenlabrada, el Zaragoza disparó en 15 ocasiones, una cantidad idéntica a la registrada en el anterior encuentro disputado en Alcorcón, donde la escuadra de JIM remontó para conseguir la única victoria hasta el momento (1-2). Cinco de esos disparos fueron entre los tres palos, es decir, solo uno de cada tres, lo que subraya la escasa puntería de los aragoneses. En todo caso, esos 15 ensayos de las dos últimas jornadas son la cifra más alta de la temporada.

Tampoco fue posible marcar de córner a pesar de que el Zaragoza botó una decena de saques de esquina, una cifra que la pasada temporada tan solo se alcanzó en dos ocasiones durante toda la campaña (en la derrota 1-0 en Albacete y en el empate in extremis en Lugo) y casi tantos como todos los que se habían lanzado en las cuatro jornadas anteriores (12). En uno de ellos, eso sí, llegó el penalti por mano en el área de Pulido que Vada convirtió en el empate definitivo.

El Zaragoza, pues, genera y crea ocasiones, pero no es capaz de materializarlas en gol. De hecho, ningún otro equipo de la categoría ha marcado menos tantos que un equipo aragonés que se quedó a cero en las tres primeras jornadas (empate sin goles en casa ante el Ibiza, 2-0 en Valladolid y 0-1 en La Romareda frente al Cartagena) y que sigue empeñado en malograr gran cantidad de ocasiones. 

De hecho, el máximo goleador zaragocista es un mediocampista recién llegado que ni siquiera ha sido titular. Vada, autor de dos tantos, ha caído de pie en un equipo que sigue careciendo de una referencia ofensiva y en el que ninguno de sus delanteros ha logrado anotar todavía. Eguaras, otro centrocampista, es el otro futbolista de la plantilla que ha visto puerta.

Un mal conocido

El mal, en todo caso, no es nuevo. El gol ya fue el gran problema del Zaragoza a lo largo de una pasada temporada en la que solo uno de los tres delanteros centros fichados durante el curso consiguió marcar. Toro Fernández y Vuckic ni se estrenaron y Álex Alegría solo marcó un tanto en una sequía para la historia.

La ineficacia continúa de momento castigando a un Zaragoza que ofrece mejores sensaciones que puntos y que se impone mejorar su relación con el marco contrario para avanzar posiciones en la tabla y consolidar sus aspiraciones. Por ahora, sin embargo, solo ha sido capaz de marcar tres goles y ninguno de ellos ha sido en jugada. Vada marcó de penalti en Fuenlabrada y al aprovechar un control garrafal de Bellvís en Alcorcón, mientras que el tanto de Eguaras vino precedido de una falta botada en corto por Zapater en las inmediaciones del área en una jugada de estrategia ensayada que el navarro culminó con un gran control y un disparo con el exterior de su bota derecha para empatar el anterior tanto del Alcorcón en Santo Domingo.

El sábado, la Real Sociedad será la siguiente piedra en el camino. El equipo vasco, entrenado por Xabi Alonso, también está teniendo problemas con el gol y, como el Zaragoza, solo ha logrado tres tantos en cinco jornadas.