Cuánto se ha hablado en los últimos días de que el Real Zaragoza no merece llevar cinco puntos después de otros tantos encuentros, que el equipo aragonés debería tener su casillero engrosado, estar en una zona más templada o alegre de la tabla a tenor de lo visto en las primeras jornadas o que, si no hubiera sido por la falta de puntería en momentos decisivos, otro gallo cantaría para el equipo aragonés.

Pero los irrefutables números indican que el conjunto blanquillo suma cinco puntos de quince posibles, unos registros que debe mejorar y conseguir en el futuro próximo que el premio vaya en consonancia con los méritos. Pero Juan Ignacio Martínez no se muestra preocupado. Tiene una meta, que no oculta nunca aunque jamás lo mencione de forma explícita, quizá por superstición, («lo que todos queremos», dice continuamente), y cree en el camino. Tiene fe en lo que ve en cada entrenamiento, en lo que observa en sus jugadores, y no se muestra preocupado por la falta de gol de la que adolece el Real Zaragoza.

Por eso, JIM siguió incidiendo en el discurso que ya acuñó inmediatamente después del choque ante el Fuenlabrada. Aseguró este jueves en la rueda de prensa previa al encuentro de mañana frente a la Real Sociedad B que ve «la botella medio llena porque el equipo está generando ocasiones». Ya entrarán, vino a decir.

La incógnita de Vada

Por eso, no ha llevado a cabo una labor de psicología y mental especial con sus arietes. Aparte, como él mismo dijo, tampoco les ha visto bajos de moral. Pero lo que sí que ha hecho durante la semana es «reforzar mucho y ejercicios de asimilación para que el jugador coja toda la confianza que tiene». Todo ello con el firme deseo de que, cuando la lata se abra, no se cierre ya.

Ahora bien, si hacia arriba no se muestra especialmente preocupado, al técnico alicantino sí que le inquieta que solo en la jornada inaugural se haya mantenido la portería a cero. «Ese es el objetivo principal en esta categoría y ese fue el lema de la temporada pasada porque teníamos que sumar muchos puntos. Los equipos que terminan en la parte alta de la clasificación lo hacen porque han encajado pocos goles. Lo hemos comentado y hablado y ojalá empecemos desde el sábado a mantener la portería a cero», comentó.

Al hilo de la defensa, también el equipo aragonés está sufriendo a balón parado y, de hecho, encajó gol del Cartagena y del Fuenlabrada. Y JIM considera que el principal remedio es extremar «la atención y la concentración»: «Es cierto, nos ha costado puntos. Lo entrenamos de la parte defensiva y ofensiva. Son muchas las circunstancias, pero debemos tener una atención muy grande», explicó el preparador alicantino.

De vuelta hacia la parcela ofensiva, quizá de forma inesperada Valentín Vada se ha convertido en el principal estilete ofensivo del conjunto aragonés. Dos partidos, dos goles y en ambos saliendo desde el banquillo han creado un foco de debate interno en un Juan Ignacio Martínez que, de todos modos, no dio pistas y no dejó nada claro si el argentino partirá de inicio y, en caso de hacerlo, por quién entraría.

«Sí, está para ser titular desde el primer día. Vino a final de mercado, de la pretemporada en Almería, donde muchas veces entrenaba aparte, pero no hay excusas y si tiene que jugar desde el principio lo tendrá que hacer», afirmó antes de hablar de que, los sistemas, son volátiles: «Igual que el otro día terminamos con tres centrales y dos laterales altos, también hablamos de un 4-2-4 en Alcorcón… El esquema lo marca el transcurso del partido».

Y que no se olvide que hay un partido por delante, ante la Real Sociedad B. El técnico advirtió sobre el filial donostiarra, un adversario que por sus características especiales, su juventud y hambre, pero también su inexperiencia, puede incitar a pensar que es un caramelo, pero de eso nada. «No quiero ni nombrar la palabra», dijo JIM. Sencillo, fácil, asequible… Cualquier sinónimo sirve.

«Va a ser un partido de dificultad máxima. Presiona alto, tiene buen trato de balón, son chavales que ya llevan tiempo con su entrenador, que el año pasado tenía automatismos y que ahora, con las incorporaciones, tienen un plus», explicó el entrenador, que también recordó que, pese al 0-3 contra el Eibar, «sacó la casta y estuvo cerca de empatar 3-3». «Juegan muy bien y si llegas tarde a la presión se generan muchos espacios y tiene jugadores importantes y que están entre el primer equipo y ellos», puntualizó.

Por último, ahora que la venta vuelve a estar de actualidad, JIM reconoció que «puede no ser creíble» y que «leo lo que se dice en los medios, pero sinceramente no se ha comentado nada, ni los capitanes me han venido a decir algo», finalizó el entrenador.