No es un tema menor los penaltis en el Zaragoza. No lo puede ser cuando el equipo, en los últimos cuatro cursos, incluido el actual, ha fallado 17 de los 41 (41,46%) que se le han señalado, el más reciente el transformado por Vada ante la Ponferradina para salvar un punto en ese partido. Por eso, encontrar un especialista como el argentino es todo un filón para este equipo, que cuenta con otro gran lanzador como Adrián González, aunque con menos presencia en el césped que el centrocampista llegado a última hora desde el Almería, que mantiene una estadística casi intacta en esa suerte suprema desde que llegó a Francia desde el Proyecto Crecer en Córdoba (Argentina) a los juveniles del Marsella en 2010.

Vada solo ha fallado un penalti en un partido de competición oficial, fue en la semifinal de la Copa Gambardella en Francia, el torneo más prestigioso de Francia en categoría sub-19 contra el Lyon y lo mandó al palo, aunque en todo caso no es un recuerdo amargo porque su equipo entonces pasó a la final y ganaron ese torneo.

En el Zaragoza ha anotado las dos penas máximas que ha lanzado. Lo hizo en Fuenlabrada, con un penalti a la izquierda de Altube, que le adivinó la intención, pero el disparo iba fuerte y bien colocado, y otro a la derecha de Amir, engañando al portero iraní de la Ponferradina, para empatar ese encuentro. Ambas penas máximas llegaron en momentos decisivos, con la posibilidad de empatar en juego, y en ellas Vada exhibió templanza y ausencia de nervios.

"Me pongo más nervioso antes de lanzar un libre directo que un penalti", dice el argentino

«Me pongo más nervioso al lanzar un libre directo que un penalti», confiesa el centrocampista en su entorno, clara señal por la que los intentos de Amir por sacarle de quicio antes del lanzamiento el jueves no tuvieron ningún efecto, solo la respuesta del argentino al meta cuando cogió el balón y pasó a su lado recordándole que le había superado. La otra cualidad de Vada es que asegura que nunca tiene un sitio prefijado en la mente cuando va a lanzar. 

Nunca sabe dónde va a lanzarlos, lo decide durante la carrera y en función de si el portero tarda más o menos en lanzarse a un lado. Amir lo hizo pronto y el engaño apenas tuvo dificultad para el argentino, con pleno momentáneo de dos de dos, Borja Sainz transformó otro en Lugo en la primera parte, con Vada en el banquillo, y Álvaro mandó al palo el suyo en el minuto 84 ante el Huesca, cuando el argentino ya había sido relevado por James y Adrián aún no había saltado al césped.

El futbolista argentino marcó dos de sus 6 goles en el Marsella en la 16-17 de penalti en su temporada más prolífica en Europa ante el gol, cifra que apunta a superar en este curso, donde aún no se ha llegado ni a un tercio del campeonato. De hecho, ya lleva tres dianas, lo que le convierte en el 'Pichichi' zaragocista, con otra que anotó para ganar en Alcorcón que sumar a su acierto en las penas máximas.

Su curso más prolífico

Vada aterrizó en el fútbol español en el 2019 y en el Almería anotó dos goles, pero no lanzó los penaltis ese año, con Darwin Núñez como especialista y Juan Muñoz, Corpas o Aguza como otros candidatos. En su cesión en el Tenerife hizo tres tantos, aunque uno de ellos en Copa, y Fran Sol o Suso asumieron las penas máximas. Ahora, en el Zaragoza los once metros son suyos.