Son la pareja de moda del Real Zaragoza. Y no es para menos. Alejandro Francés y Francho Serrano fueron los protagonistas en la trabajada victoria ante el Eibar, dando toda una lección de fútbol pero, sobre todo, de compromiso y personalidad ante uno de los mejores equipos de la categoría.

Los dos jugadores se han convertido, por derecho propio, en los preferidos por la afición. Y es que, además de su extraordinario rendimiento en el césped, los dos futbolistas son canteranos, criados en la casa y conocen a la perfección lo que significa el sentimiento zaragocista. Ambos dieron sus primeros pasos en la Ciudad Deportiva y desde muy jóvenes se veía que tenían algo especial, un gen ganador que buena falta hace en el club aragonés. 

 La trayectoria de ambos ha seguido un camino similar. Desde sus primeras apariciones, los dos canteranos no han parado de crecer, primero consolidándose como jugadores del primer equipo y después ganando peso en los esquemas y en las alineaciones. Aunque Francés es un año más joven el defensa debutó antes con el primer equipo. Fue en un partido de Copa del Rey ante el Socuéllamos en la temporada 2019-2020. El central también tuvo minutos ese curso en tres partidos en Segunda División: frente al Lugo, Almería y Ponferradina. 

Actualmente, y a pesar de sus 19 años, Francés se ha erigido, ya no solo como el jerarca de la defensa zaragocista, sino quizá como el de todo el equipo. Siempre ha sido un chico que ha apuntado muy alto y ha levantado grandes expectativas, pero en esta temporada se está consagrando como central de equipo grande para una década. Lejos de amilanarse ante las dificultades, cuanto más peligrosa y más fiera es la presa a la que tiene que contener, más se agiganta el defensa aragonés, y eso es algo que no puede decirse de muchos.

De promesas a realidad

A Francho le llegó el turno de estrenarse un año después que a Francés, en la pasada campaña, cuando debutó ante el Mallorca en un Zaragoza dirigido en ese momento por Rubén Baraja. Desde el primer momento demostró que no iba a ser un futbolista de paso, sino un jugador a tener en cuenta. Además, su progresión está siendo sobresaliente. Francho cada vez se parece más a un jugador ‘box to box’ como dicen los ingleses, que desde el centro del campo puede aparecer en cualquier lugar del terreno de juego y sumando grandes intervenciones tanto ofensivas como en defensa.

En la actualidad, JIM tiene claro que ellos son dos de sus piezas clave y los datos así lo avalan. Francés ha sido titular en todos los partidos que ha jugado durante esta campaña en la Liga y solo ha sido sustituido en una ocasión, ante la Real Sociedad B, perdiéndose los minutos de descuento. Por su parte, Francho ha rotado más, consecuencia de los múltiples cambios que ha realizado el entrenador alicantino para dar con la tecla en el centro del campo, pero desde que volvió de su última lesión el canterano ha sido titular en los últimos siete encuentros ligueros y en los que solo ha sido sustituido en una ocasión.

Los dos han declarado su amor incondicional a los colores zaragocistas, pero la situación del club es la que es, los equipos de la élite han fijado sus ojos sobre ellos y si por motivos económicos tienen que abandonar el club, como ya es tradición con los canteranos talentosos, la pareja se dejará antes hasta la última gota de sudor por devolver al Zaragoza a Primera.