Segunda puerta a cero consecutiva, pero quinto encuentro sin marcar. El Real Zaragoza no pierde, pero tampoco gana. La misma tónica, en fin, de toda la temporada y que mantiene al equipo aragonés más cerca de abajo que de arriba.
"El equipo va a crecer mucho en la segunda vuelta, la renovación que se va a hacer nos va a ayudar", asegura el técnico
Por eso, Juan Ignacio Martínez, técnico del equipo aragonés, volvió a mostrar una mezcla de sensaciones al término del partido ante el Valladolid. «No podemos conformarnos con el empate, pero estoy muy orgulloso del equipo. Los jugadores han sacado la casta y no se ha visto en el campo la diferencia en la clasificación, pero nos ha faltado el gol», admitió el alicantino.
En este sentido, JIM se congratuló del «muy buen partido» de los suyos en cuanto a batallas libradas y trabajo acumulado. «Estoy contento por haber logrado el objetivo de no encajar y mantener la portería a cero ante un rival que había marcado casi siempre, pero no podemos conformarnos porque apenas hemos ganado partidos en casa en la primera vuelta y estamos en deuda con la afición y queríamos que se fueran contentos», apuntó.
El mal endémico
Pero el problema sigue siendo el mismo. «Nos falta ese punto de diferencia que es el gol. Al final, el fútbol solo entiende de gol», sintetizó JIM, que no se pronunció acerca de la posibilidad de buscar una solución para ese problema en el mercado invernal. «No entro en estos temas, pero el equipo va a crecer mucho. La renovación que se va a hacer nos va a ayudar mucho en la segunda vuelta, estoy convencido», afirmó.
El entrenador mostró su «máximo respeto» a la movilización de la afición que presidió el choque. «Al final todos defendemos el escudo del Real Zaragoza, que es de todos. Yo llevo poco tiempo aquí, pero me iré siendo zaragocista porque hablamos de un sentimiento más allá de las rencillas con la directiva. Estamos sufriendo todos y tenemos que sacarlo entre todos».
JIM, que ensalzó el «gran partido» de Petrovic, admitió que los cinco partidos sin ganar ni marcar son «muchos» y se mostró satisfecho con el debut de Jaume Grau: «Es un chico joven al que se le ve desparpajo y le corre el balón. Es algo tímido pero se irá soltando», asegura.
