Giovanni, Gianluca y Giuliano son los tres hijos del Cholo Simeone con Carolina Baldini y los tres futbolistas, aunque el técnico del Atlético tiene otras dos niñas pequeñas más con su actual pareja. Al Real Zaragoza llega para dar el salto Giuliano, el más joven. “Es un jugador muy atrevido, muy rápido, que le gusta ir por delante y que no le tiene miedo a nada, eso es seguro. Va a todas, no deja un balón por perdido. A la afición le va a gustar y lo va a valorar mucho, porque se deja todo por el club en el que está”. Así lo define Gianluca, el mediano, ya cercano a los 24 años, que acaba de fichar por el Xerez Deportivo, en Segunda RFEF tras su paso por el CD Ibiza y antes por el Sant Rafel, el filial de la UD Ibiza. El mayor, Gio, de 27 años, ha sido ya internacional absoluto con Argentina, triunfa en el Calcio y el Hellas Verona acaba de ejecutar una opción de compra de 10 millones para ficharlo.
“Papá siempre nos decía que hiciéramos lo que más nos diera la felicidad. Obviamente, por su carrera, el fútbol nos atrapó a los tres y decidimos tomar ese camino. Pero él nunca nos obligó, siempre nos insistió en buscar la felicidad”, explica Gianluca, que tacha de “casualidad” que los tres hayan sido delanteros, ya que el Cholo fue un centrocampista defensivo, porque “nunca nos dijo de qué teníamos que jugar”, la misma casualidad que también explica sus nombres, todos comienzan por ‘Gi’ y son italianos. “Estuvo viviendo allí y le gusta mucho ese país. Son tres nombres parecidos pero no sé si hay una explicación justa para eso. Nunca le hemos preguntado la verdad, aunque a lo mejor deberíamos (sonríe)".
“Giovanni y yo somos los más parecidos porque somos más de área. Giuliano tiene también más opciones de jugar por fuera, es muy rápido, encara y le gusta ir para delante”
Los tres son delanteros, pero “Giovanni y yo somos los más parecidos porque somos más de área. Guliano tiene también más opciones de jugar por fuera, aunque cerca de la portería también se siente cómodo. Él es muy rápido, encara siempre y le gusta ir para delante”, asevera el hermano mediano. Gianluca admite que en la casa de los Simeone antes, y ahora en las reuniones que les permiten sus agendas, el balón es centro neurálgico. “Está presente muchísimo, porque somos una familia muy futbolera, que vive este deporte con pasión, aunque no queramos siempre terminamos hablando de eso. Está mi padre, pero aun sin estar él, también al final el balón es el centro de la conversación”, relata, recordando los piques que tenían los tres hermanos, con más de siete años de diferencia entre Giuli y Gio y con Gianluca entre medio: “Entre los tres nos hemos apoyado mucho, nos hemos fijado siempre en el más grande y hemos sido de contarnos las experiencias. Pero también había muchos piques también cuando jugábamos en casa, porque los tres somos muy competitivos”.
“Es una persona muy tranquila, familiar y humilde fuera, aunque sea muy competitiva dentro. Vive muy concentrado en su trabajo”
Los tres pasaron por la cantera de River Plate, donde “aprendimos mucho en lo humano y en lo futbolístico”, y el fútbol les ha llevado por diferentes caminos. A Giuliano le condujo al equipo que ocupa un espacio más grande en el corazón de su padre, a un Atlético al que llegó al Juvenil A en 2019 y que también era el sueño de Gianluca, pero no pudo ser. “A mí claro que me habría gustado. ¿A quién no? Giuli ha tenido esa oportunidad y nos puso muy feliz cuando debutó en el primer equipo y en todo su paso por el filial”, espeta, entrando en la forma de ser de su hermano, en el Giuliano en la intimidad, donde “es una persona muy tranquila, familiar y humilde fuera, aunque sea muy competitiva dentro. Vive muy concentrado en su trabajo”.
Ahora, la vida lleva a su hermano a La Romareda, porque “ha priorizado jugar, ya que conseguirlo en el Atlético aún no lo iba a poder hacer”. ¿Hasta dónde puede llegar? Gianluca no hace apuestas. “Tiene que demostrarlo y lo veremos en esta temporada, pero posee todas las herramientas que fue trabajando y consiguiendo en estos años. Las oportunidades se dan y hasta ahora las ha sabido aprovechar”, indica el hermano del ahora zaragocista, que sí sabe el gran escaparate que puede ser el conjunto zaragocista para Giuli. “En el Zaragoza sabemos que hubo delanteros jóvenes y algunos argentinos que lo han hecho muy bien. Nos hemos fijado en estas semanas hablando con él en eso y es el mejor ejemplo de que va a un gran equipo”.
“Seguramente que iremos cuando podamos. Yo creo que mi padre algún día irá, yo también. Es un bonito estadio y una gran afición y esperemos ver a Giuliano triunfando ahí”
Eso lo asume toda la familia Simeone, “también papá, que está muy contento por esa oportunidad, por ese salto a Segunda, toda la familia lo está”. Por ello, no será extraño ver al Cholo algún día en el palco de La Romareda, como tampoco a Gianluca. “Seguramente que iremos cuando podamos. Yo creo que mi padre algún día irá, yo también. Es un bonito estadio y una gran afición y esperemos ver a Giuliano triunfando ahí”. Triunfar en la vida de un delantero, y eso lo saben bien los tres hermanos, es hacer goles. No quiere Gianluca poner una meta a su hermano, que hizo 25 en el filial en Tercera RFEF el año pasado, aunque “ojalá sean muchos”, lo mismo que tampoco desea entrar en la comparación con Gio, el que más elevado ha puesto el listón por ahora en los hijos del Cholo. “Ojalá que Giuliano llegue lo más lejos posible, todo lo alto que pueda. Tengo confianza plena en que lo puede hacer muy bien y alcanzar grandes cotas”.
