El Real Zaragoza ya ha cumplido con la primera de las 10 anualidades que quedaron establecidas en el convenio de acreedores ordinarios en junio de 2021 tras la modificación del mismo. Ese pago, de 2,47 millones, lo mismo que los otros nueve que restarán después, hasta 2031, debía abonarse el pasado 1 de septiembre y así se hizo por la nueva propiedad, por el grupo inversor que encabeza Jorge Mas si bien el empresario de origen cubano no es el máximo accionista del club. Algunos de los acreedores más importantes que tiene la entidad han confirmado a este diario que recibieron la cantidad prevista. Del mismo modo, lo harían todos los que consignaron en tiempo y forma la cuenta corriente en la que depositar el dinero, ya que en los dos primeros pagos, con el anterior convenio, hubo algunos acreedores que no lo hicieron y esos abonos se realizarán cuando acabe el actual convenio.
Hay que recordar que en cualquier convenio de acreedores el impago de las cantidades establecidas en el concurso puede ser causa de disolución de la SAD si el acreedor así lo denuncia. El Juzgado de lo Mercantil número 2 de Zaragoza, a cargo de María del Carmen Villellas, dictó el pasado 21 de junio de 2021 una sentencia favorable a la solicitud para la modificación del convenio, una vez presentada por parte del Real Zaragoza unos días antes la documentación solicitada con las adhesiones superiores al 50% de la masa pasiva de acreedores ordinarios a la propuesta de modificación del convenio de acreedores. Así, el anterior convenio, que finalizaba en 2025, ahora pasaba a terminar en 2031 y con una cantidad lineal en los pagos mientras estuviera en Segunda. Es decir, habrá entre 2022 y 2031 diez pagos de 2,47 millones hasta completar los 24,7 totales que había antes de ese primer pago de 2,47.
La modificación permitió a la propiedad anterior, además de diferir el pago de 12 millones de euros hasta el 2025, disponer de seis años más para satisfacer la deuda y blindarse ante un posible descenso, ya que, en ese caso, los pagos quedarán suspendidos siempre que el Zaragoza no permanezca más de cinco años, consecutivos o alternos, en esa categoría de bronce, en la Primera RFEF en este caso. Además, dado que las cantidades del concurso iban en aumento hasta superar los 5 millones en los dos últimos años, 2024 y 2025, el modelo actual era más asumible por cualquier posible comprador, como al final sucedió con el nuevo grupo inversor que se hizo con el club el pasado 24 de mayo.
Del mismo modo, si se sube a Primera División, se abonará anualmente y mientras se esté en la élite un 20% de los créditos ordinarios que haya en ese momento. El Zaragoza ya abonó las dos primeras anualidades, de 1,36 y de 1,679 millones respectivamente en 2018 y 2019, pero en la tercera, en 2020, pidió la suspensión ante el juzgado estableciendo como causa de la misma las pérdidas derivadas de la pandemia.
