El Real Zaragoza de Juan Carlos Carcedo se ha ido torciendo a un ritmo vertiginoso, al punto de que después de solo nueve jornadas, el equipo está en el mismo lugar de sus peores temporadas en Segunda División. Los números, junto con las apuestas del técnico y los cambios que La Romareda no comprende, han puesto ya a Carcedo en el ojo del huracán. El pasado domingo escuchó alto y claro de la grada «Carcedo, vete ya» después de que el Zaragoza fuera incapaz de superar al Oviedo mientras el entrenador quitaba atacantes para meter centrocampistas.
De la idea original de Carcedo poco queda. De aquella presión alta, de lo de ser protagonista con el balón, el Real Zaragoza ha pasado a basar su juego en mandar balones frontales para que Giuliano y Azón busquen su oportunidad. A la pérdida de identidad se suma la falta de resultados como cóctel fatal para Juan Carlos Carcedo, que ha quedado señalado ya por La Romareda. En nueve jornadas, el preparador riojano suma 10 puntos fruto de dos victorias, cuatro empates y tres derrotas. Los números son muy similares a los que le costaron el puesto a otros entrenadores en esta triste etapa en Segunda División.
El curso pasado, con JIM en el banquillo, el Real Zaragoza había logrado una única victoria en las nueve primeras jornadas, seis empates y dos derrotas que le hacían sumar nueve puntos, uno menos que ahora. Nueve también acumuló en las nueve primeras jornadas de la campaña 2020-21, aunque los aplazamientos por la pandemia hicieron que Rubén Baraja no dirigiera esas nueve jornadas. El técnico fue entrenador del Real Zaragoza diez partidos y, en sus primeros nueve logró 10 puntos con dos victorias, cuatro empates y tres derrotas. Así, el arranque de JIM ha sido el peor del equipo hasta la fecha.
El factor común en estos inicios de temporada tan pobres y que no se ha corregido este curso es la falta de gol. El Real Zaragoza de Juan Carlos Carcedo solo ha hecho cinco goles en nueve partidos, misma cifra que el equipo de JIM hace un año. El de Baraja había hecho nueve, una media mejor pero que era la peor de este periplo en Segunda. En cambio, el equipo ha igualado sus mejores registros de goles en contra con tan solo siete en nueve partidos, igual que el año pasado y que en la temporada 2015-16, la mejor en esa faceta hasta entonces.
Los aragoneses
Las temporadas con un inicio de Liga más solvente han coincidido con las que el equipo veía la puerta rival con fluidez. Después de nueve partidos las mejores puntuaciones las firmaron los equipos de dos entrenadores aragoneses, Víctor Fernández y Víctor Muñoz. Ambos acumulaban 16 puntos de los 27 posibles a estas alturas fruto de cuatro victorias, cuatro empates y una única derrota. Con Víctor Muñoz, en la campaña 2014-15 el equipo había hecho doce goles y recibido diez. Con Fernández, en la 2019-20, eran 15 goles a favor, la mejor cifra de la década, y 8 en contra. Sin embargo, Muñoz duró solo 14 jornadas al frente del equipo.
No fue ese el paso más breve por el banquillo aragonés. Baraja duró diez partidos, los mismos que Imanol Idiakez en la campaña 2018-19. Entonces el Real Zaragoza acumulaba los mismos puntos que ahora, diez, con dos victorias, cuatro empates y tres derrotas. Números calcados aunque el equipo había logrado más del doble de goles, once, y había recibido diez. Una jornada más duró la paciencia con Luis Milla. El turolense alcanzó la novena jornada del curso 2016-17 con 12 puntos, fruto de tres victorias, tres empates y otras tantas derrotas. El equipo había logrado catorce goles, la segunda mejor cifra de la década, y recibió trece.
Natxo González, uno de los tres entrenadores que en estos diez años ha podido empezar y terminar una misma temporada, llegó a la jornada nueve muy cuestionado con doce puntos después de tres victorias y tres empates, con doce goles a favor y nueve en contra. El primer técnico de este decenio, Paco Herrera, acumulaba a estas alturas catorce puntos, había ganado cuatro partidos y empatado dos, con trece goles a favor y nueve en contra. Fue despedido después de 30 partidos. Ranko Popovic, en el curso 2015-16, acumulaba 15 puntos después de cuatro victorias y tres empates, con once goles a favor y siete en contra. El balcánico aguantó 18 jornadas.
Juan Carlos Carcedo no ha comenzado bien, sobre todo porque su equipo emite cada vez peores sensaciones. Con el riojano en el banquillo, al Real Zaragoza le costó cinco jornadas lograr su primera victoria, sumando dos empates y dos derrotas en las cuatro primeras, y tardó cuatro partidos en anotar su primer gol del curso. El equipo aragonés ha ganado a la Ponferradina fuera y al Sporting en casa, empatando con Levante, Las Palmas, Eibar (que acabó con nueve jugadores) y Oviedo. Las derrotas llegaron frente a Cartagena, Lugo y Mirandés. Números pobres que, sumados a sus decisiones extrañas y no compartidas por La Romareda, han puesto ya a Juan Carlos Carcedo en el ojo del huracán antes incluso de celebrar el Pilar.
