Poco más de cinco meses después de que la nueva propiedad apostara por Juan Carlos Carcedo como entrenador y decidiera la renovación de Miguel Torrecilla, una decisión impopular y de difícil explicación en un proyecto que nacía, el Real Zaragoza de Jorge Mas y Real Z LLC, el de la multipropiedad, el Fondo Ares y la sombra del Atlético de Madrid y, sobre todo, el que dirige Raúl Sanllehí en el día a día, da su primer gran giro de tuerca con la salida de los dos pilares deportivos del equipo. Un adiós doble que llega después de un inicio de temporada con demasiadas sombras y dudas en un equipo situado en los bajos fondos de la tabla y con la afición dando muestras de hartazgo tras la ilusión que provocó el cambio.
«Desde el Real Zaragoza queremos agradecer la dedicación, la profesionalidad, el esfuerzo y el trabajo tanto de Juan Carlos Carcedo como de Miguel Torrecilla durante su etapa en el Real Zaragoza. Asimismo, les deseamos la mayor de las suertes en los nuevos retos profesionales que afronten a partir de ahora», aseguró el club en su comunicado, escueto para ser una despedida doble de tanto calado. «Desde este momento, en el Real Zaragoza trabajamos para reconducir la situación deportiva y continuamos con la firme convicción marcada desde el inicio de temporada de competir al máximo para que la familia zaragocista se sienta identificada y orgullosa de su equipo», añadió el club.
Se van Carcedo y Torrecilla en una salida conjunta que ya se preveía desde hace días. Estaba más decidida la del ejecutivo salmantino, llegado con la anterior propiedad en diciembre de 2020 y que ha trabajado bajo la batuta de Sanllehí en estos meses, empezando por la decisión de Carcedo, pero también en otros fichajes y apuestas del club. Pero la puerta de salida es para él, después de escuchar alto y claro cómo La Romareda lo pedía y solo unos meses después de estampar la firma en su renovación por un año en junio.
Una continuidad que desde el primer minuto tuvo una contestación social. Sin embargo, Sanllehí decidió que el conocimiento del mercado y del club de Torrecilla podían ser muy útiles para el nuevo proyecto, aunque cambiara su forma de trabajar, ya que hasta entonces el mando del salmantino en la parcela deportiva había sido mayor. Vistos los resultados, está claro que la decisión no fue acertada, tras un mercado de verano con siete fichajes, si se incluye en ellos al meta Rebollo, con futbolistas que apenas han aportado (el inédito Jairo, Gueye, Mollejo, Manu Molina...) y muchas más sombras en la planificación que luces en una plantilla con claros déficits en su confección.
La continuidad de Torrecilla ya tuvo difícil explicación y su adiós estaba decidido desde hace días
Así, Sanllehí ya llevaba varias semanas trabajando el mercado de directores deportivos, sondeando a candidatos y teniendo sobre la mesa a otros, señal clara de que la decisión estaba tomada y que había que hacerla efectiva cuanto antes para que el que llegara tuviera tiempo de preparar la ventana de enero. Con Torrecilla se marchan sus dos colaboradores llegados con él, su hermano Toño y Javi López.
El adiós de Torrecilla, que ya lo barruntaba también el propio director deportivo, estaba ya marcado en este parón, al regresar de Vitoria, pero fue allí donde Carcedo escribió su epitafio. El entrenador, al que se le comunicó su salida este domingo y firmó entonces su despido, había regateado el cese en algunas ocasiones, sobre todo con la victoria ante el Villarreal B. Era una apuesta muy personal de Sanllehí y su elevada salida, con dos años firmados a razón de unos 350.000 euros, era otra razón de calado para pensarse mucho ese adiós definitivo.
La debacle de Vitoria aceleró el despido de Carcedo, al que Sanllehí no ha podido aguantar más
El caso es que ya con la derrota ante el Lugo llegaron dudas a la propiedad, pero el Zaragoza levantó el vuelo con dos triunfos, Sanllehí hizo encendidas defensas de su apuesta y en lugar de mantener esa dinámica al alza el equipo se fue cayendo hasta que La Romareda explotó ante el Oviedo y mantuvo su ira contra el Villarreal B, pese a ganar al final, y el Andorra. Así, la perspectiva del partido ante el Málaga en casa y el enfado de la grada, el parón y la debacle en Vitoria aceleraron la medida de Sanllehí con Carcedo, con el que dicen adiós su segundo, Sebas Corona, y Sergio Domínguez, preparador físico. La plantilla está citada este lunes a las 17.30 horas para entrenarse y empezar a preparar el choque de Copa ante el Diocesano del domingo en una sesión que podría ser dirigida por Javi Suárez, miembro del cuerpo técnico y empleado del club.
