La actualidad del Real Zaragoza

Gueye y Sabin Merino, el marrón de más de un millón

Las situaciones contractuales de los dos delanteros suponen un importante obstáculo económico en la planificación de Cordero y Sanllehí

Cordero, director deportivo, Aured, financiero, y Sanllehí, general, junto al representante del Albacete en La Romareda.

Cordero, director deportivo, Aured, financiero, y Sanllehí, general, junto al representante del Albacete en La Romareda. / JAIME GALINDO

S. Valero

La profunda renovación que vivirá el Real Zaragoza en este verano se ve facilitada por los finales de contrato o de cesiones que vive la actual plantilla, lo que permitirá que esa revolución, con no menos de una decena de incorporaciones, deba tener que ocupar poco espacio en indemnizaciones para un límite salarial en Segunda que las previsiones de la SAD sitúan en un margen igual o, más probablemente, algo superior a los 10,1 millones de este curso. Sin embargo, esa planificación tiene dos obstáculos importantes en Pape Makhtar Gueye y Sabin Merino, cuyo espacio supera el millón de euros entre ambos y a los que el club, y en el caso del senegalés el grupo inversor que tiene la propiedad del Zaragoza, debe intentar encontrar acomodo.

En la cesión del KV Oostende belga de Pape Gueye las cifras globales hablan de unos 800.000 euros de coste entre el salario del punta, que algunas fuentes sitúan más abajo que otras, aunque sí ronda el medio millón, y el pago de ese préstamo. Es una cesión por un año con el aval del grupo inversor y con opción de compra obligada por 3 millones en caso de un ascenso que no se va a dar.

Con Gueye hay un segundo año de cesión que el grupo inversor que avaló su llegada y que lo tiene que comprar en primera instancia desea evitar

Sin él, la relación contractual en el fichaje del ariete senegalés habla de un segundo año de cesión, con otro contrato claro (la FIFA no permite las cesiones fijadas de antemano de más de un año, pero sí prorrogarlas cuando estas acaban), en el que, si hay ascenso, el Zaragoza debe ejecutar la compra y, si no lo hay, es el grupo inversor quien desembolsa esa cantidad. Así, las bases de esa segunda temporada en el Zaragoza están puestas y el Oostende, como hizo en enero, no va a revertir una cesión por la que tiene garantizado un traspaso por el delantero.

Pape Gueye, en el partido ante el Albacete del pasado domingo.

Pape Gueye, en el partido ante el Albacete del pasado domingo. / JAIME GALINDO

Así, el grupo inversor será el encargado de buscar acomodo al jugador este verano, pero no se puede descartar en estos momentos que el Zaragoza vuelva a ser escenario de sus evoluciones como futbolista. Es obvio que ni a la propiedad, con varios clubs en esas sinergias, ni al Zaragoza les interesa un segundo año de cesión de Gueye dado su nivel, pero en estos momentos su situación es uno de los 'marrones' que Raúl Sanllehí, director general, y Juan Carlos Cordero, director deportivo, tienen pendientes para este verano.

Solo el Toro por delante

El senegalés volvió a ser titular el domingo ante el Albacete en el Municipal y repitió el decepcionante nivel de sus anteriores actuaciones, sin ganar duelos por alto ni exhibir capacidad de remate, con un fútbol que permite dudar mucho de los informes que llevaron al grupo inversor propietario del Zaragoza a su apuesta por el ariete, ya que su llegada fue una cuestión absolutamente de la propiedad del club blanquillo y de otros como Lens, Millonarios, Inter de Miami o Calcio Padova, además de las conexiones con el Atlético y sus clubs franquiciados. 

Gueye no jugaba de inicio desde el duelo ante el Villarreal B en La Cerámica el 14 de enero ni lo hacía en casa desde el 15 de octubre, precisamente ante el mismo enemigo. Acumula 19 partidos, cinco de titular y 607 minutos, y contra el equipo manchego solo le sostuvo la voluntad en una Romareda que se mofó de él en su anterior aparición, con la Ponferradina, y que esta vez aplaudió su esfuerzo, aunque no pudo reprimir la música de viento a su salida.

Así, el ariete africano ya suma esos 19 partidos sin marcar, igualando a otros arietes como Vuckic (617 minutos) o Latapia (621) y solo por detrás en choques sin ver puerta del Toro Fernández, que se fue hasta 32 y 1.360 minutos. Con 16 y 909, en el siguiente escalón, se quedó Sabin Merino el curso pasado, cuando fue la apuesta de enero de Miguel Torrrecilla para aumentar la pólvora del equipo. 

Sabin Merino se lamenta en un acción ante el Almería la temporada pasada.

Sabin Merino se lamenta en un acción ante el Almería la temporada pasada. / JAIME GALINDO

Las sinergias de la propiedad ayudaron a situar al delantero vasco, con contrato hasta 2025 y medio millón de salario, en el San Luis de México, que depende del Atlético. Allí, su carrera no ha despejado, con 29 partidos entre el Apertura (17) y el Clausura (12 hasta ahora), ha jugado en 17 hasta el momento, pero solo dos presencias en el once, 283 minutos en total, y dos dianas, una de ellas de penalti. La competición regular en México acaba a finales de abril para un San Luis que lucha en la parte baja de la tabla.

Sabin Merino no seguirá en México, en el San Luis, y regresa en junio con un destino por buscar, aunque el Zaragoza no les ha comunicado sus planes aún

Sin opción de compra, su continuidad en México no se plantea por la parte del punta, donde se asegura que el Zaragoza no les ha comunicado que deban buscar destino en verano, aunque se asume que ese escenario es el más probable, por no decir seguro. La idea de Sabin Merino es estar a principios de julio en la Ciudad Deportiva, si bien el Zaragoza intentará buscar, como en el caso de Gueye, una salida antes.