La 40ª jornada de Segunda

Vigaray vuelve a jugar en La Romareda más de dos años después

El lateral fue recibido con una gran ovación y dejó un gran pase a Bebé. Acaba contrato y no seguirá y esos minutos le sirven de despedida, ya que en este curso solo había jugado en Albacete

Vigaray, sonriente tras Ratón, Bermejo y eugeni al final del partido.

Vigaray, sonriente tras Ratón, Bermejo y eugeni al final del partido. / ANGEL DE CASTRO

S. Valero

Carlos Vigaray volvió a jugar en La Romareda con la camiseta del Real Zaragoza más de dos años después, ya que la última vez que había pisado ese césped fue ante el Espanyol el 8 de mayo de 2021 cuando el conjunto catalán logró el ascenso a Primera y después el lateral madrileño, ya con molestias en la rodilla derecha, solo jugó fuera de casa, en Las Palmas y Mallorca, antes de que tuviera que ser intervenido en su rodilla derecha, primero con una artroscopia y después con una operación de cartílago.

El futbolista, novedad en la citación, saltó al campo en el minuto 78 en lugar de Larra, acalambrado, y dejó un pase magnífico a Bebé que el extremo estrelló en el lateral de la red de Aarón. Antes, un choque con Ortuño le hizo ser atendido, pero el caso es que Vigaray se reencontró con La Romareda más de dos años después, ya que en este curso solo tuvo los minutos finales, hasta 12, en el Carlos Belmonte de Albacete.

El defensa, que tuvo una calurosa bienvenida de La Romareda, se lesionó en el menisco de la otra rodilla, la izquierda, en marzo pasado y fue operado el 21 de ese mes, pero ha llegado a tiempo de despedirse de la afición, ya que acaba contrato y el club no ejecutará la opción de un año más pactada cuando se bajó el salario en el verano pasado. "Es bonito que Vigaray haya tenido minutos, si hay un jugador querido en el vestuario es él", aseguró Escribá, feliz por los aplausos al defensa, que no escuchaba la ovación de La Romareda desde el 23 de febrero de 2020, ante el Deportivo, ya que luego llegó la pandemia y el estadio vacío hasta su lesión.

El regreso de Mollejo

El otro retorno fue el de Víctor Mollejo, que jugó más de tres meses después de la fractura de tobillo que sufrió el 5 de febrero ante el Andorra, de la que fue operado, y que entró al campo en el minuto 68 con un gran aplauso para el jugador cedido por el Atlético, sobre el que hay posibilidades de que siga un segundo curso a préstamo en La Romareda, algo que el Zaragoza y futbolista ven con buenos ojos.